Jóvenes pasivos y despreocupados
Siempre me ha llamado la atención la pasividad de los jóvenes actuales en asuntos de vital importancia para vosotros, para ti, tumbado en el sofá, entregado a las maquinitas, las fiestas, los coches, los viajes... mientras la vida continúa.
Dices estar “preocupado” por tu futura pensión, temiendo que no llegues a cobrarla; juras y perjuras contra los “culpables” mientras tu presencia en las manifestaciones de los pensionistas reivindicando mejoras en las mismas, tu futuro, es testimonial.
Nada que ver con los jóvenes franceses que “obligaron” a su gobierno a retirar una reforma de las pensiones que pretendía alargar la edad de jubilación desde los 62 hasta los 64 años.
Muchos vivís del trabajo y el esfuerzo de vuestros progenitores mientras criticáis que los abuelos que han sacrificado sus vidas por vosotros, han hecho de niñeros de sus nietos y muchos están pagando las hipotecas de sus hijos en paro, cobren pensiones, cuando si no fuera por ellos estaríais debajo de un puente.
Sois tan pasivos que hasta el Gobierno se ha dado cuenta y aprovecha para aprobar un proyecto de ley de Medidas de Prevención y Lucha contra el Fraude Fiscal, que supone un cruel castigo fiscal en los impuestos relacionados con los inmuebles, esos mismos inmuebles que vosotros, los jóvenes, esperáis heredar el día que vuestros padres o abuelos ya no estén; de hecho, se convertirán en algo tan inalcanzable que tendréis que optar por renunciar a esas herencias porque Transmisiones, Sucesiones o Patrimonio serán prohibitivos para la gran mayoría de hipotéticos herederos.
Visto así, quizás no lleguemos a valorar la magnitud de la estafa o saqueo, que eso es, desde mi punto de vista, lo que han propuesto los legisladores ¿Dónde está vuestra lucha?
Por simplificar, Hacienda (en contra del criterio del Tribunal Supremo) delega en el Catastro que a través del VRM (Valor de Referencia del Mercado), instrumento que sirve a las Haciendas para superar el valor real de los inmuebles, establezca el valor de los mismos como base imponible a la hora de calcular la liquidación de los impuestos.
Para calcular tu ganancia patrimonial como heredero, Hacienda usará los precios de adquisición antiguos y no los del momento de la firma del pacto sucesorio.
Este punto es la madre del cordero. Imaginemos un caso recurrente, teniendo en cuenta que más del ochenta por ciento de los españoles tienen una vivienda en propiedad, y que ésta será heredada por vosotros, hijos o nietos.
Tururú. El nuevo redactado establece que si se transmite el bien antes del fallecimiento del donante, se usará la misma fecha y valor de adquisición que tenía el donante para calcular la ganancia o pérdida en IRPF, aunque el pacto sucesorio se haya formalizado muchos años antes.
Es decir, que una vivienda comprada por tus padres hace 50 años, según escritura, por un millón de pesetas (6.000 euros), llegado el momento de la herencia, el Catastro la tasa al precio actualizado de 120.000 euros y tú, que estás con una mano delante y otra detrás, esperando como agua de mayo la propiedad de esa vivienda, te ves penalizado por Hacienda que te imputará grandes beneficios que, obviamente, no podrás pagar. Renuncias a tu sueño proletario de tener una vivienda propia y el beneficio va para el Estado que se lucra con un bien por el que tus padres han pagado todo tipo de tasas e impuestos, y que a todas luces te pertenece.
Fin de la historia. Los bienes acumulados (con mucho sacrificio, digo), “donados” gratis total para la Hacienda Pública, mientras tus progenitores en el Más Allá te reclaman un poco más de nervio y esfuerzo en la defensa de su legado. Despierta de una vez.
Saludos cordiales.
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