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Chepe Álvarez Lobo

13 de Julio del 2021 - Javier Arjona (Siero)

Ayer se volvía a hablar de Gaspar García Laviana en la “Semana negra”, a través del reciente libro de Pipo, “Mientras yo viva Gaspar no morirá”, y hoy ha fallecido una de las personas mencionadas, siempre que de la memoria sobre el cura guerrillero se trata: José Álvarez Lobo, Pepín, Chepe en nicaragüense, educador, dominico, y la última persona civil española que tuvo contacto en Costa Rica con Gaspar, el día de Santa Bárbara, una semana antes de su muerte en combate.

También su hermano había sido recordado esta semana, al hablarse en Cambalache de las elecciones peruanas. Ricardo Álvarez Lobo fue una figura relevante en sus 40 años de permanencia en la Amazonía peruana. Dominico también, su hermano José le tradujo al “asturiano de Nembra” varias de sus obras sobre los pueblos indígenas.

Chepe Álvarez Lobo, además de un papel destacado en la educación en Chinandega, ha sido el principal biógrafo del obispo Valdivieso, una figura central de la defensa de los derechos de los indígenas, contemporáneo de Bartolomé de las Casas, e inspirador del movimiento cristiano de liberación.

“Valdivieso, obispo mártir de Nicaragua”, “Cartas del obispo Valdivieso: la defensa de los pueblos de América” son dos de los libros de Chepe-Pepín.

El Obispo Valdivieso fue asesinado por la familia Contreras, del gobernador de Nicaragua, y su crimen, y la falta de justicia, ha servido para recrear mitos, como el del cura sin cabeza que señala la mala conciencia de las autoridades que no hicieron justicia, o el abandono de la ciudad “León Viejo”, ante los temblores del volcán Momotombo, interpretados como castigo por la impunidad por el asesinato del obispo.

Pero Pepín Lobo no sublima al obispo: lo primero que afirma es que los luchadores primeros por los derechos indígenas... fueron y son los propios indios, y no gente universitaria o extranjera, obispos o curas… y que si la historia ha sido escrita con mano blanca, los primeros en oponerse a la agresión a los indígenas han sido y son los propios afectados... pueblos nativos.

Lobo considera que Gaspar Garcia Laviana, en cuanto defensor de la causa de los pobres, es un continuador de Valdivieso.

Chepe junto a otros frailes y curas “ya estaba” en Nicaragua antes de que un aluvión de personas de esta tierra llegaran-llegáramos a curiosear qué estaba pasando en aquel pequeño país del 80 al 90. Qué era eso de la RPS. Y en ese marco nace el COSAL, que conformó organización comarcal en toda Asturias y coordinación estatal muy efectiva.

Tras su regreso de Nicaragua en razón de su edad, ha seguido escribiendo hasta que la salud se lo ha permitido, y hemos compartido diversos escenarios para difundir y defender la historia de vida y lucha de Gaspar García Laviana, hijo de minero como también lo eran los hermanos Lobo.

“Conocí personalmente a Gaspar. Soi testigu de los sos suaños, les sos lluches, les sos crisis, los sos compromisos, la so entrega a les causes quamerites y esixen dedicación plena. Tuvi y sigo teniendo la suerte de compartir los ideales pa los que vivió y polos que se desvivió”.

“Sólo nos queda preguntarnos cómo juzgaría Gaspar nuestra pasividad ante lo que pasó y sigue pasando.

¿No tendrá él nada que reprocharnos por lo que acontece en Asturias, por el desmantelamiento de todo, por los desempleados, por los forzados a emigrar, por los engaños al pueblo asturiano, por la frustración de muchos, por tantas y tantas cosas que están urgiendo nuestra participación activa?

Gaspar, que se resistió a aceptar lo que está mal, nos invita a luchar contra el pesimismo, contra la falta de fe en que es posible una realidad asturiana distinta.

Y a luchar contra lo que trae muerte al pueblo, a las Cuencas, a Asturias: sus Cuencas, su Asturias”.

Chepe Vive, y la Lucha, la suya, la nuestra, Sigue y Sigue.

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