La situación en Cuba
Las consecuencias económicas de esta pandemia están siendo tremendas, pero, si las estamos sufriendo en España, las están sufriendo mucho más en países más pobres, independientemente de qué régimen político los gobierne. En toda Iberoamérica esta crisis económica ha derivado en tensiones sociales como nunca se habían visto, desde Chile a Colombia, desde Brasil a México, así que Cuba no iba a ser una excepción, eso sí, siempre se habla más de Cuba, sobre todo para lo malo, uno de los primeros en hacerlo ha sido el líder de la oposición española, señor Casado, el mismo personaje que jamás ha dicho nada de esas dictaduras horribles que son las monarquías feudales de la Península Arábiga, sí, donde está exiliado, o de vacaciones permanentes, me da igual, Juan Carlos I, donde si discrepas te pueden dar 800 latigazos, cortarte la cabeza con una espada o torturarte hasta la muerte y luego disolverte en ácido. Tampoco nos ha dicho el señor Casado, ni ninguno de los de su onda que tanto quieren al pueblo cubano, nada del brutal embargo económico que sufre Cuba por parte de los EE UU desde hace 60 años. ¿Se acuerda usted de lo bien que nos habló la derecha española del “presidente encargado” de Venezuela, Juan Guaidó, sí, ese que empezó su carrera política dando palizas en las calles y buscando izquierdistas casa por casa, y de cómo los de Rajoy convencieron a la UE para que lo reconociera con un estatus ridículo? Pues bien, cuando resulta que el “demócrata” se quedó con el dinero que le dieron para la subversión y le han quitado el estatus otorgado gentilmente, de él ya no hablan. No seré yo el que diga que Cuba es una democracia, pero lo que sí tengo claro es que los “demócratas” cubanos son muchísimo peores que los comunistas cubanos. Que estés contra tu gobierno no quiere decir que te tengas que manifestar con gorras y banderas de los EE UU, el secular enemigo de tu patria desde que los yankees echaron a España de allí en la guerra de 1898, como he visto con estos ojitos. También los “demócratas” de la “gusanera de Miami”, como les llaman en Cuba, aprovechan estos días que el Pisuerga para por Valladolid, perdón, que el Río Cauto pasa por Palma Soriano, para arrimar el ascua a su sardina. Recordemos quiénes son estos “demócratas” con solo una muestra: el 6 de octubre de 1976, un Douglas DC-8, de Cubana de Aviación, volaba entre las islas de Barbados y Jamaica, con destino La Habana, cuando fue objeto de un atentado terrorista. En el avión se habían colocado dos bombas que debían explotar al mismo tiempo, pero un fallo hizo que hubiera un intervalo de varios minutos entre las explosiones y que en la primera el avión no se desintegrara, dando tiempo al comandante de la nave a comunicar a la torre de control que había explotado una bomba colocada en el baño trasero. Murieron las 73 personas que viajaban en la aeronave. Hoy se sabe que el responsable directo fue el agente de la CIA Luis Posada Carriles. Además de las consecuencias perniciosas del bloqueo, Cuba era, y es, muy vulnerable a una crisis económica global, porque dependía, y depende, mucho del turismo, ¿le suena? Muchos cubanos vivían del turismo y/o trabajaban directamente en este sector gravísimamente afectado por la pandemia y ahora lo están pasando muy mal. Pero Cuba es una potencia en medicina, aunque a veces te cueste encontrar un simple antibiótico en sus farmacias, de hecho es el único país de toda Iberoamérica que ha sido capaz de elaborar una vacuna contra el covid con la que piensa vacunar a toda su población. España tiene grandes intereses económicos en Cuba en el sector turístico y estas grandes empresas españolas con intereses en Cuba ya han dejado claro que esperan que el Gobierno de la isla controle la situación, porque confían más en los comunistas cubanos que en el caos general que podrían desencadenar esos “demócratas” y los que mueven los hilos, precisamente los inventores de la estrategia del caos para luego utilizarla en el propio beneficio, una estrategia, dicho sea de paso, que no les ha salido bien en ninguna parte. Por cierto, Rusia ha advertido contra toda “injerencia externa en Cuba”.
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