La Nueva España » Cartas de los lectores » Por favor, colillas sin humos y en los ceniceros

Por favor, colillas sin humos y en los ceniceros

15 de Julio del 2021 - Miguel Fernández-Palacios Gordon (Madrid)

Tirar la colilla sin apagar, inocente aunque incívico acto reflejo, acarrea graves consecuencias: mientras se consume bosquejando barrocas volutas de humo, nos consume la vida y aumenta el efecto invernadero al deteriorar la calidad del aire con gases que dificultan la oxigenación de la sangre y dañan nuestros órganos, en especial pulmón, corazón y cerebro; y eso sin tener en cuenta sus casi setenta sustancias químicas cancerígenas ni el alquitrán que bloquea los bronquios de quien lo respira. Si un nene tropieza o nuestro perro paseando la aplasta pueden sufrir quemaduras. Pero, aunque se apague, cada colilla libera al contacto con el agua muchos tóxicos; por eso, cuando se usan el suelo o los alcorques como ceniceros, el veneno que contiene –mercurio, plomo, cianuro, cadmio…– contamina con la lluvia hasta 500 litros de este vital líquido.

Sabiendo que este residuo tóxico no es biodegradable y amenaza la biodiversidad, por favor, si fuma, al menos apague la colilla en un cenicero.

Cartas

Número de cartas: 49001

Número de cartas en Diciembre: 124

Tribunas

Número de tribunas: 2175

Número de tribunas en Diciembre: 3

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador