Trasvases, progreso y valentía
Hace pocos días leo que el señor Sánchez, nuestro querido jefe de desgobierno, ha tenido otro feliz y relajante sueño no sé si de la mano de Morfeo o de los angelitos. Le insinuaron que para la buena marcha de la paz y concordia entre españoles suprimiese por decreto el trasvase Tajo-Segura.
Pero en serio, ¿qué hace este sujeto en la Moncloa? No da un golpe en el clavo, todos los da en la herradura.
Se habla mucho y con razón de la riqueza que para España generan la industria y el turismo, y muy poco del sector agrícola ganadero. Hace años se comentaba su secular atraso y ser la cenicienta de la economía.
España en 70 años dobló su población, se come más y mejor que nunca con un coste medio por familia de menos del 20% de sus ingresos. Hace 60 años se invertía el 80% en comer. También agasajamos a 83 millones de turistas con una cocina de primerísima calidad. Y otra perla: las exportaciones agrícolas, en primer lugar por delante de las industriales.
Todos los sectores nos necesitamos y cooperamos en el muy alto nivel de vida que disfrutamos. Todos dicen ser imprescindibles y con razón. Pero yo creo que comer bien tres veces al día no lo es menos. Imaginemos un mundo sin agricultores, ¿qué comeríamos? Retrocederíamos miles de años y antes de amoldarnos a la nueva vida moriría de hambre y en disturbios casi toda la humanidad.
Hace 35 años ingresamos en la CEE tras largas negociaciones en las que el sector hortofrutícola salió beneficiado; a la parte ganadera del norte nos tocó la mala, en especial con la leche. A pesar de ello, antes importábamos carne y otros productos ganaderos de Sudamérica. Hoy, con un consumo muy superior, somos exportadores netos.
Y ahora con un Gobierno que no sé si nos hemos dado, o por qué retorcidos senderos nos llevó, nos dice que cada palo aguante su vela y cada cuenca hidrológica se arregle con el agua que Dios le dio; lo que condena a una rica y próspera zona agrícola, turística y con fuerte aumento de población a un futuro incierto.
Yo creo que los que nos estamos buscando un incierto futuro somos todos los españoles. Circulamos con las luces cortas y muy floja batería. Nos daremos un buen tortazo. Visión larga de futuro.
Y hablemos de trasvases. Nada de eliminar, ampliar. En el norte no diré que sobra agua, pero con un plan bien trazado y ejecutado podríamos a un sur deficitario cederle una muy pequeña parte de nuestra agua, que para nosotros no sería un gran problema y para ellos sería como lluvia de oro que beneficiaría a toda España. Allí cada gota cuenta y tengo la seguridad de que no se malgastaría.
Mi humilde opinión. La cuenca del Ebro se bastaría a sí misma y abastecería al Levante español. Para el resto deficitario y en especial el sureste, habría que pensar en el Duero y quizás ayudado por el Sil.
Serían unas grandes obras, pero asumibles. En su financiación quizás nos ayudase Europa. En el año 2004 teníamos un plan aprobado con ayuda europea que Zapatero paralizó al llegar al poder con un buen momento económico. Veo un freno en las autonomías, el desquiciado endeudamiento y la falta de valentía para una gran obra de interés nacional, aconsejable hoy, amortizable en poco tiempo e imprescindible en el futuro.
La Meseta norte está a unos 800 metros de altitud, Castilla-La Mancha a unos 600. Ingenieros tenemos que con un conjunto de canales y sifones para las partes bajas, túneles y sifones invertidos para atravesar las altas con un pequeño desnivel y sin bombeo, incluso poder colocar turbinas de energía eléctrica.
Necesitamos la valentía, diálogo, entendimiento y generosidad del que tanto presumimos para cosas que no voy a citar y menos calificar como se merecería. Sería muy fuerte. El dinero podría salir de la infinidad de gastos superfluos que nos permitimos. España con 17 autonomías, y la mayoría de competencias transferidas, se permite un Gobierno central de 23 ministerios y un sinfín de consejeros, asociaciones, empresas, subvenciones, ayudas, enchufados... de muy dudosa utilidad.
España es la huerta europea y mucho más que podría ser. Gran producto y muy temprano. Solo necesita agua y sentido común en los que podrían acercárselo. Una inmensa riqueza pero solo al alcance de gobernantes valientes y con visión de futuro.
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