La mejor cura contra la artrosis
A los baños de las termas de Alhama de Aragón ya iba mi abuelo Benjamín antes de la guerra para ponerse en cura del reuma.
A orillas del río Neso o Jalón los romanos crearon una de las mejores termas de España. Fui yo a limpiar el cuerpo y el alma de inmundicias y tristezas y vuelvo como un barco recién carenado a la batalla. A los baños de Alhama iba mi abuelo en carro desde las tierras altas de Segovia el año que había buena cosecha a curar el reuma antes de la guerra.
Era el balneario más popular en Castilla desde antes de la Edad Media porque en él se siguen habilitando prácticas que nos legaron los romanos. En plena estrada que unía Asturica Augusta (Astorga) con Tarraco era el punto de recalada de las legiones y la Legio VII Victrix que sirvió en la Hispania ulterior y Romania en el Ponto, dejando su marca grabada en algunos cipos conmemorativos y piedras miliares que todavía se ven en el paramento de algunas casas.
Está a setenta kilómetros de Medinaceli, donde el emperador Domiciano construyó el arco de triunfo para conmemorar la victoria de Roma sobre Numancia.
El chorro de agua tépida alivió mis varices; la manguera a presión distendió mis reumáticos omóplatos y la fangoterapia con que unté de barro las lumbares alejó el dolor de espalda. La cólera del español sentado y el trabajo sedentario al cabo de los años resquebraja la sólida columna vertebral. Toda mi vida me gané los gabrieles sentado ante la máquina de escribir y ahora el ordenador.
El sol de Aragón y los paseos por la ribera, tiempo de meditación, fueron como unos ejercicios espirituales en comunión con la naturaleza. El pueblo se encuentra en una hondonada al pie de unos gollizos que amenazan las primeras casas y revelan la acción del hielo cuaternario sobre las morrenas. Pero llevan muchos siglos sin derrumbarse.
Es un pueblo bonito y silencioso como todo Aragón con un castillo roquero o atalaya de vigilancia y una iglesia de 1622 donde dijo misa Lope de Vega. Ahora el párroco es un buen cura mexicano jovencito que ha llegado a evangelizar a los baturros en devolución de visita como otrora lo hicieron los españoles con sus antepasados aztecas.
Vino desde Guanajuato un maya pura sangre hombre de Dios con quien tuve el placer de tener una larga conversación. Su labor es difícil. Tiene a su cargo la cura de almas de seis pueblos. Los jóvenes apenas van a la iglesia pero verle celebrar el Santo Sacrificio me inspiró gran devoción. Dios le dé ánimo en la pelea.
La iglesia de Alhama de Aragón posee un retablo barroco de caoba que es de lo más precioso que he podido contemplar a lo largo de mi interés por este arte: una santa cena y un Padre Eterno que da gloria de ver.
Las termas tienen un origen romano y fueron las más famosas en la Edad Media, siguiendo los dictámenes de los balnea latinos con su "laconicum" (estufa), "caldarium" (agua caliente) que se conjuga con las frías del "tepidarium".
Al final los masajes de barro en el "eleothesum". Para rematar, un gimnasio cuyos ejercicios te hacen trasudar copiosamente puesto que en todo el complejo residencial hay instalado un hipocausto como complemento a los "balnea" (baños) y el "labrum" (cuba o bañera).
Viva Aragón, que es la provincia más libre de la península Ibérica. Tiene la fuerza y el arranque de un cuerpo de jota. Ya lo decía Baltasar Gracián: "Para libres, las barras de Aragón".
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