Desde Noreña
Señora doña Nieves Concostrina.
He comprado y leído alguno de sus libros, entre ellos "Muertes ilustradas de la Humanidad" Polvo eres II, y puesto que de muertos se trata me entra una duda razonable. ¿Será cierto todo lo que dice de los muertos ilustrados de la humanidad?
En la entrevista que le hicieron, que salió publicada en LA NUEVA ESPAÑA del viernes día 15 de octubre, a la pregunta: "¿Qué opina de que haya familias que aún no hayan podido dar sepultura a sus muertos tras cuarenta años de democracia?", usted responde: "Es algo mucho peor que triste. Es un insulto a la memoria. No entiendo que cierta gentuza que pide constantemente respeto a los muertos le niegue a otra persona un punto de referencia para poder enterrar unos huesos. He visto ancianos de noventa años cruzando los dedos para no morirse antes de poder recuperar un hueso de su padre. Negar eso solo se entiende desde la crueldad. Lo duro es que los golpistas y los fascistas tienen bien enterrados a sus muertos. Todo esto es una canallada". Fin de su respuesta.
Usted, siendo periodista que "comenzó a interesarse por el mundo de la Historia", desconoce que en Noreña, Asturias, que yo sepa con certeza, desde mayo de 1936 a octubre de 1937 (léase "Asturias" concejo a concejo. Noreña, páginas 88 y 89, editado por el Real Instituto de Estudios Asturianos) fueron detenidas y ejecutadas por los defensores de la libertad y democracia de la república, elegida por el pueblo, 34 personas, sin que las autoridades republicanas hicieran algo para evitarlo, o sencillamente se hiciera el procedimiento que marcaba la Constitución de la República Española de 9 de diciembre de 1931. Título III. Derechos y deberes de los españoles. Capítulo I. Artículos 29, 31, 34. Todo ello en una población de unos 2.500 habitantes. Tres de esas personas ¿desaparecidas?, ¿asesinadas?, después de más de 80 años, sus esposas, hijos, nietos o sobrinos (algunos fallecidos) tampoco saben dónde están. ¿Fosa común? ¿Dónde? ¿Boca de una mina? ¿Cuál?
Esto sucedió en Noreña y en otros pueblos y ciudades de España.
¿Sabe a cuánto asciende la cantidad de euros destinada en los Presupuestos Generales del Estado, en las autonomías o en los ayuntamientos dedicados a este fin? Dar digna sepultura a todos.
Usted dice que es una "canallada" no dar sepultura a los asesinados por el franquismo. "Negar eso solo se entiende desde la crueldad", "lo duro es que los golpistas y fascistas tienen bien enterrados a sus muertos". ¿Usted sabe si esas 34 personas eran fascistas, es decir, personas con actitud autoritaria y antidemocrática que socialmente se considera relacionada con el fascismo y golpistas? ¿Los seguidores republicanos y las autoridades republicanas tenían derecho a sacarlos de sus casas sin orden judicial, y a asesinarlos sin juicio previo ni derecho a defenderse porque la República estaba legalmente constituida?
¿De qué se les acusaba? ¿Me puede decir en qué se diferenciaba la actitud de la República y sus seguidores, defensores de la libertad y democracia de los golpistas y fascistas que tilda de "canallas?
En el titular de su entrevista se dice: "Es de canallas negar lápidas cuando los muertos golpistas están bien enterrados". ¿Es que los republicanos tenían licencia para matar a los que no pensaran igual que ellos? ¿No es igualmente una actitud autoritaria y antidemocrática? "Fascista" es un término insultante que a algunos les encanta aplicar a otros que no piensan como ellos, metiendo en el mismo saco a todos los familiares y personas asesinadas por la represión republicana.
No se trata de que los familiares de los asesinados por la represión republicana, "gentuza" como usted dice, estén bien enterrados (¿quiere decir bien muertos?) nieguen una sepultura digna para todos los asesinados por la represión franquista, que fue muy larga. Gobiernos hay y hubo que se denominan de izquierdas y progresistas que no lo han resuelto. Se trata de reconocer todos, los errores, atrocidades y sufrimientos ocasionados en esos tiempos que permanecen en nuestras memorias, porque hay muchas memorias, no solo la que algunos llaman "memoria democrática". Según don Enrique Moradiellos, catedrático de Historia Contemporánea y académico de número de la Real Academia de la Historia, "las memorias históricas son muchas, diversas, en conflicto. Es memoria histórica la republicana de la represión, la de los franquistas, la de los que no quisieron tomar parte, la de los anarquistas enfrentados a los comunistas en la república, dentro del socialismo también es memoria histórica la parte negrinista enfrentada a los caballeristas..." (entrevista publicada en LA NUEVA ESPAÑA el domingo día 22 del XI de 2020). Creo que lo importante es no mantenernos con insultos y desprecio de forma generalizada y permanente. "Gentuza", "canallas"... Debemos hacer todo lo posible por mitigar el sufrimiento de todos, sin insultos, odios ni rencores, reconociendo todos a los inocentes asesinados, dándoles digna sepultura a unos, y no retirando o despreciando el recuerdo a la memoria de otros, según usted fascistas y golpistas.
Ni todos los republicanos del momento fueron defensores de la libertad y democracia, ni todos los demás fueron defensores del golpismo, hubo muchas personas que no se inclinaron ni defendieron a ninguno de los dos contendientes en la Guerra Civil, ni en la dictadura posterior.
Le recomiendo, si es que no los ha leído ya, los siguientes libros:
"La guerra civil y la tercera España". Autor: Joaquín Riera. Editorial Almuzara S.L. 2016.
"El camino al 18 de julio". Autor: Stanley G. Payne. Espasa Libros.S.L.U.
"El Holocausto español". Autor: Paul Preston. Edición en castellano Randon House Mondadori. S.A.
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