La rebelión en marcha; Suiza marca el camino
Siniestros personajes de las élites, por naturaleza congénitamente fanáticos, deshonestos, tribalistas y estafadores, nos han teledirigido a integrar equipos antagónicos en defensa o ataque de personas favorables o no a las vacunas anticovid, haciendo especial hincapié en la estigmatización de los que son reacios a las mismas, empujándolos a absurdas discusiones de bar, trabajo e incluso de familia, mientras ellos se frotan las manos, repasando sus cuentas corrientes.
El conflicto implica una conspiración gigante para un final perverso, con escaramuzas de guerreros de la justicia social, que parecen ir in crescendo, radicalizando las posturas de unos y otros, y de unos contra otros:
A- “Mi apuesta: Si no te vacunas, ¡perfecto!, pero quedas fuera del sistema público sanitario”.
B – “Yo subo la apuesta: Si te vacunas, ¡perfecto!, pero si enfermas, que tampoco te atiendan ¡por imbécil!; yo no tengo por qué pagar tu miocarditis o tu ictus”.
Ya digo, parece un conflicto menor entre vecinos, pero en instancias superiores donde disponen de “armas” más sofisticadas e intereses globales milmillonarios, las batallas empiezan a librarse a otra velocidad y con mucha más intensidad. Los soldados dejan paso a los generales. De simples escaramuzas a batallas cruentas.
Para muestra, un botón en las páginas de Global Research: una asociación suiza, Swiss Public Eye, organizó una manifestación en Berna donde personalidades mundiales de todos los ámbitos arroparon al abogado y activista Robert F. Kennedy Jr., sobrino del expresidente John F. Kennedy, en un estimulante discurso ante una enfervorizada multitud, en el que habló de las mentiras del covid en los EE. UU., así como en todo el mundo.
Kennedy Jr. se refirió a la discriminación totalmente antidemocrática que ya hoy tiene lugar en la mayor parte de Europa, incluso en Suiza, donde los no vacunados no pueden entrar a un restaurante, no pueden ir a un gimnasio, ni a un club, ni al cine, ni a un teatro, ni a ningún evento público.
Mencionó como ejemplo al Gobierno austriaco, que a partir de la medianoche del domingo 14 de noviembre declaró el primer bloqueo del mundo para los no vacunados, algo inaudito en ningún otro lugar, donde por el hecho de no dejarse inyectar este veneno de ARNm, los “rebeldes” están excluidos de la sociedad. Están bloqueados. Son discriminados.
Robert Kennedy Jr. vino a decirles a los suizos que son hoy “el último bastión de la democracia en el mundo”, y, fundamentalmente, para pedirles que en el próximo referéndum del 28 de noviembre de 2021, donde tienen la oportunidad y la responsabilidad histórica de votar a favor o en contra de la “Ley Marcial de la Salud”, voten “NO”.
Terminó su discurso con esta arenga a la multitud presente: “Todos los que aman la libertad para sí mismos y para la sociedad y para el mundo, deben ir a votar ‘NO’, en masa. Nosotros, el pueblo, debemos y podemos superar esta tiranía del covid. ¡Nuestro grito de batalla es ¡LIBERTAD!, ¡LIBERTAD!, ¡LIBERTAD!”.
P.D. Nota de última hora: La Policía y el Ejército austriacos se oponen al Gobierno, negándose a controlar los pases sanitarios en nombre de la “libertad y la dignidad humana”. Se unirán a una gran manifestación de vacunados y no vacunados contra el confinamiento obligatorio, el 20 de noviembre de 2021 en Viena.
Saludos cordiales.
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