El visionario Zapatero
El presidente del Gobierno de España, el señor Rodríguez Zapatero, acaba de descubrir, y así lo ha manifestado en una rueda de prensa en Oslo (Noruega), que tiene una visión distinta de lo que se considera empleo y paro.
Según dijo en Oslo -no hace en esta época tanto frío allí como para que se le congele el cerebro-, la crisis económica le ha hecho “visionario” para llegar a la conclusión de que los parados que no trabajan, pero que están haciendo cursos de formación, trabajan, y que son parados que están “trabajando para el país”.
La formación es buena, si sirve para conseguir empleo, pero por sí sola no es suficiente. El parado que está recibiendo un curso de formación es un parado, diga Zapatero lo que diga. Sus declaraciones, efectuadas en Oslo, son una ofensa a los cinco millones de desempleados y una contribución al desprestigio de España en todo el mundo, por lo desafortunadas y ridículas.
Zapatero reconoce que la tasa de desempleo es muy alta, pero lo justifica y lo atribuye a la “explosión demográfica”, diciendo que la población activa se ha incrementado en 5,2 millones de personas en la última década.
Si el señor Zapatero se conforma con que los parados reciban cursos de formación y con ello considera resuelto el paro en España, no aborda el verdadero problema que es el desempleo.
Estamos en lo de siempre: tratar de maquillar, tratar de negar la realidad, convirtiendo el problema en insoluble.
Negó la crisis, luego negó la gravedad de la misma y ahora trata de negar la evidencia de que España tiene la tasa de paro más alta de Europa, el doble de la media de la Unión Europea.
Así es imposible abordar las reformas necesarias para enfrentarse a la crisis y salir de la misma creando empleo.
Y, entre tanto y no, los sindicatos amigos se forran gestionando los cursos de formación.
Lo que sí anuncia Zapatero en Oslo es el tijeretazo a las pensiones.
España lo que necesita es otro Gobierno y otra política económica que cree empleo y riqueza, entre otras cosas para sanear las cuentas públicas y hacer sostenible el sistema de pensiones.
En conclusión, hemos descubierto de nuevo que el “visionario” Zapatero renuncia a hacer una política económica de creación de empleo que genere la riqueza necesaria para sostener las pensiones.
Hemos descubierto de nuevo que España necesita pronto un Gobierno del Partido Popular.
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