Independentistas y además chulos
¿Qué tendríamos que hacer con estos nacionalistas, independentistas y además chulos que se ríen en nuestras barbas? No estoy exagerando, creo que es exactamente lo que está ocurriendo. ¿Cuántas naciones pueden presumir de quinientos años unidas? Si contamos con los dedos de las manos nos sobrarían varios.
i Ha llegado la hora de decir basta! Lo tendrá que decir el pueblo. Lo debería decir el Gobierno, pero él está a lo que todos sabemos. Él es una parte importante del problema. Recordemos lo que pasó aquel nefasto 1 de octubre, se les aplicó el artículo 155 de nuestra Constitución y una parte de los responsables entraron en la cárcel. Otros pocos huyeron como cobardes, y por ahí siguen. Un capitán es el último en abandonar su barco; un político debe ser coherente y responsable de sus actos, y no huir dejando a sus compañeros y seguidores en la estacada y luego desde lugar seguro, dándose la gran vida, mandarles a los que se quedaron que aprieten.
A los encarcelados se les indultó cuanto antes y después repitieron que lo volverán hacer. Lo dicho, el Gobierno es parte del problema.
Si los socialistas son un partido constitucional, la solución la veo fácil. Hay una mayoría sobrada para reformar la Carta Magna. No niego que sería una medida controvertida, importante y seria, pero, visto donde nos quiere llevar, además con un descaro que supera todo lo imaginable, sería lo correcto. A grandes males grandes remedios.
Nos acercamos a la veintena de partidos en la Cámara baja, y subiendo. Hoy tenemos cinco partidos nacionales; demasiados. En nuestro entorno, las naciones que mejor funcionan de dos a cuatro. Dos moderados y máximo otro de centro bisagra sería lo ideal. ¿Para qué sirve en Madrid tanto partido autonómico que ya sabemos a lo que van? Solo piensan en su autonomía, y algunas veces tan mal que con sus caprichos la perjudican al igual que al resto de España. Y luego vemos cómo van evolucionando y se hacen descaradamente independentistas convirtiendo el Parlamento nacional en un gallinero ingobernable. Cuantas más competencias se les pasan más te exigen; es intolerable e insufrible ver una sesión parlamentaria.
Solución: A Madrid los partidos nacionales, a las autonomías los autonómicos; sería una forma de separarles. Elecciones generales, y todo partido que no consiga pongamos un 2% de votos en todas las autonomías queda fuera de las cámaras nacionales. Que se presenten en las autonómicas, que es donde tienen su lugar. Y luego que allí gobiernen con unas leyes bien definidas constitucionalmente, y tutelados por el poder central.
Yo recuerdo que Alemania, en sus primeras elecciones de la posguerra, lo dejó en el 5% para sus estados federales. Completamente democrático y ahí está como motor europeo.
Necesitamos políticos valientes y audaces capaces de coger el toro por los cuernos y dominar la situación, y no como algunos que no citaré que no merecen el honorable nombre de políticos. Este estado de cosas nos está perjudicando a todos, mucho más de lo que algunos se imaginan, tanto a las autonomías problemáticas como al resto de España.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo