Si yo fuera Djokovic
Es muy probable que antes de su viaje de ida a Australia para participar en el Open de Australia, ni el propio tenista serbio fuera consciente de la extraordinaria repercusión ni del vendaval mediático que iba a generar su “caso” en todas las latitudes.
Sus asesores seguramente pensaban que, dada su condición de favorito y el reclamo publicitario que representa, no iban a tener ningún problema, pero no consideraron que en Australia se están tomando muy en serio lo de la pandemia, como se ha podido comprobar por el inapelable fallo del tribunal que ha entendido de este caso.
Así las cosas, si yo fuera Djokovic, tomaría mis propias decisiones y actuaría pensando en mis intereses, en mi carrera deportiva y en el tiempo que aún me queda para jugar al más alto nivel para lograr algún Grand Slam más y batir el récord que actualmente le iguala con Federer y Nadal.
Supongo que actuará en consecuencia para poder culminar su brillantísima carrera como el gran campeón que es, uno de los más grandes de la historia de este deporte, que podría hacer historia porque aún le queda recorrido para ganar alguno de los grandes y proclamarse el mejor de los mejores.
Pero como no soy Djokovic me he limitado a dar una opinión, gratuita, como siempre.
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