UNED, ¿Universidad inclusiva?
Me veo en la necesidad de poner en conocimiento del que pueda interesar y usar a modo de denuncia pública mi relación recientemente comenzada con la UNED. Realmente esta relación comenzó hace un año, cuando me decidí a realizar el Curso Acceso a la Universidad para mayores de 45 años.
La decisión de volver a estudiar la tomo debido a que soy una persona jubilada prematuramente por las graves secuelas producidas por un accidente deportivo que me dejan postrado en una silla de ruedas con una teraplejia causada por una lesión medular a la altura cervical y me convierte en una persona "Gran dependiente" por una "Gran invalidez", véase, todo a lo grande, entiéndase la sorna.
Para ocupar parte de mi tiempo, después de mis cuidados diarios, rehabilitación, etcétera, decido matricularme en un proyecto educativo que se vende como inclusivo y apto para personas trabajadoras, personas alejadas de centros educativos, discapacitados, etcétera.
Los primeros exámenes, debido a la pandemia de sobra conocida, se realizan de la mejor y única manera factible para mí, que es a distancia mediante la plataforma creada al efecto llamada Avex que me permite realizar pruebas con mi tablet, único instrumento que me permite cierta agilidad de escritura con mi pulgar; un bolígrafo o un teclado sería imposible para mí.
Pues ya el curso pasado para el Acceso, en los exámenes de junio se me quiere obligar a que los realice de manera presencial, la UNED se desentiende porque dice que es decisión de Ministerio de Educación, que ignora primeramente los informes médicos que me obligan a enviar en varias ocasiones firmados por el Hospital de Parapléjicos de Toledo.
Finalmente acceden a que los realice mediante Avex sin necesidad de montar un circo con una entrada accesible para mí, llevando una persona que señale la opción elegida por mí para el tipo test, un profesor para las respuestas a desarrollar, que lo debo realizar oral, más el desplazamiento, sondajes mediante cateterismos intermitentes que debo recurrir a ellos en cualquier momento, etcétera.
Pues bien, para no cansar más al posible lector de estas líneas, una vez matriculado y por fin universitario, quién lo iba a decir, mi tetraplejia continúa, como ustedes comprenderán; la pandemia continúa pegando fuerte por desgracia. Pues la gran opción inclusiva que es la UNED me obliga a realizar los exámenes presencialmente, ahora sí que es decisión de los docentes de la Universidad, instándome a realizar un circo para realizar dichos exámenes, para lo que tienen una plataforma virtual estupenda y además, por añadido, nos exponen, esto es a todos, a un contagio casi asegurado debido a la aglomeración de estudiantes. Eso sí, van a abrir todas las ventanas para ventilar bien en enero y nos invitan a ir abrigados cuando un tetrapléjico no gestiona su temperatura corporal tanto con las bajas temperaturas como con las altas, pudiendo provocar problemas de salud añadidos.
Señores de la UNED, muchas gracias por quitarme la ilusión para adquirir conocimientos o ayudarme a conseguir un reto personal como es ir aprobando alguna asignatura. Gracias a ustedes, el que firma esta carta no va a presentarse a sus exámenes. Lo que les sobra en conocimientos de su materia les falta en empatía y sentido común. No vendan su UNED como un espacio para todos porque no es así.
Gracias por llegar hasta esta última línea, señor lector.
Un saludo.
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