No queríamos taza, pues ahora taza y media
Algunos, y creo que somos muchos, pensábamos que con el actual Gobierno del señor Sánchez, maniatado por quienes le apoyan con intereses separatistas y contrarios a lo que algunos creemos sería el buen hacer para que España funcione como una nación unida, respetada y ocupando en el ámbito internacional el lugar que le corresponde, llegado el momento de elecciones generales, los ciudadanos, a la vista de lo mal que a mi entender van las cosas, quizás podríamos contar con una oposición sensata y digna de generar confianza capaz de librarnos de quienes en ciertos asuntos parece que se han propuesto llevarnos como país a la ruina en todos los sentidos.
Grosso error, el PP, que es el partido mayoritario en la oposición, no se sabe por qué oculta razón, acaba, a mi entender, de hacerse el harakiri en el sentido más amplio de la palabra, y tirado por la borda toda posibilidad de llegar al poder y mandar a casa al señor Sánchez y a cuantos le apoyan, que, en mi opinión, tienen de socialdemócratas lo que yo de obispo. No se puede ser más torpe ni más cándido. ¿Cómo se puede cometer la torpeza de darnos el espectáculo que acaban de darnos la señora Ayuso y el señor Casado? Yo siempre pienso que el señor Sánchez debería hacer un curso acelerado de política socialdemócrata en la escuela de los ya fallecidos Willy Brandt y Olof Palme y de tantos otros que dieron ejemplo de saber hacer política, pero ahora veo que también necesitan con urgencia estos dos gorriones que comandan el PP dar un vistazo a las enseñanzas de la CDU alemana; ahí tienen aún vivita, a Dios gracias, a la señora Merkel, unos y otros podrían aprender mucho, y los españoles ganar con ello más aún.
Estos señores deben creer que el hecho de que los ciudadanos les demos el voto es darles con ello carta blanca y potestad para hacer con el país lo que les venga en gana. No, no es así, señores, ustedes son elegidos para administrar los intereses del país y de sus ciudadanos lo mejor que sepan y puedan, pero no como algo de su propiedad privada. El señor Sánchez, a mi entender, lleva demostrándonos hacerlo de ese modo desde el día que ocupó la Moncloa; ustedes, señores del PP, acaban con su actitud de demostrar tener la misma intención. En su actual guerra o batalla, no ha habido ni habrá vencedor, solo habrá vencidos, y esos somos el país y sus ciudadanos, que somos quienes hemos perdido la oportunidad de poder hacer uso de la alternancia política que la democracia nos concede. Una pena y un bochorno, todos ustedes dan pena. ¿Quién se va a fiar de alguien así?
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