La Nueva España » Cartas de los lectores » Reflexiones del 29-S

Reflexiones del 29-S

13 de Octubre del 2010 - Florentino Fernandez Ruiz (Mieres)

Norteamérica, que dio al mundo el modelo de guerra revolucionaria contra la esclavitud feudal, es hoy uno de los países donde se abre el mayor abismo entre un puñado de multimillonarios rebozados en el fango y el lujo y millones de trabajadores al borde de la exclusión y la miseria a veces descarnada y otras maquillada .

La esclavitud asalariada impuesta por unos pocos multimillonarios va desempeñando su papel de verdugo mercenario desencadenando guerra tras guerra y crisis tras crisis desde Filipinas en 1898, la república socialista de Rusia en 1918, el bloqueo a Cuba, las masacres de Hiroshima y Nagasaki, Vietnam etc. etc.. y últimamente la crisis que nos han regalado envuelta en la globalización después de acabar con el telón de acero so pretexto de defendernos del comunismo.

Alguien ha dicho que esta crisis es sistémica, y efectivamente lo es porque el capitalismo ha concentrado las riquezas en manos de unos cuantos Estados que se han repartido el mundo.

El reparto sucesivo, el enriquecimiento sucesivo entre los Estados lo mismo que entre las personas, solo se puede producir a costa de otros y es lo que ha generado esta crisis sistémica.

Europa, donde dominó un capitalismo inteligente y calculador que dio paso a un capitalismo socialdemócrata del que emergió la llamada sociedad del bienestar, se está metiendo en el mismo callejón sin salida por el que transitan los que tienen la pretensión de hacerse con la hegemonía del mundo.

Metidos en ese agujero negro llamado crisis las inercias de los partidos de la izquierda europea han abdicado de sus principios éticos de lucha y sacrificio para hacer el mismo recorrido que el capitalismo hegemónico mundial, desapareciendo del horizonte de las masas trabajadoras asalariadas estupefactas y sin poder de reacción ante lo que se avecina.

España donde hemos contemplado la sociedad del bienestar desde la distancia y hemos disfrutado muy poco tiempo por el accidente histórico de la dictadura padece con más virulencia todo este proceso de desmantelamiento de derechos sociales y económicos globalizados.

Un día nos levantamos con la cantinela de que somos un país de viejos, quizá porque para que aumente la tasa de natalidad del país los jóvenes no debieran de ver el futuro desde la óptica que ahora les contagian sus padres, que en el colmo de la resignación admitimos que nuestros hijos vivirán peor que nosotros hemos vivido, lo que no debe contribuir a estimular la libido.

Otro día los indicadores nos dicen que no sabemos idiomas los cual es un hándicap enorme. Lo que no dicen es para que les sirve a los que los saben salvo para relacionarse en la cola del INEM, mientras personajes corruptos en los ayuntamientos y entes autonómicos viven una vida de lujo y apenas saben español.

Nos bombardean sistemáticamente con lo que cuesta mantener el paro y el comprometido futuro de las pensiones. Pero no dicen nada de los balances de las empresas, ni de cómo crecen las grandes fortunas mientras el dinero sigue escondido...

Nos cuentan que vivimos por encima de nuestras posibilidades que son las de pagar un hipoteca por una modesta vivienda, mantener un coche y disfrutar un mes de vacaciones, si toda una vida de trabajo no da para consolidar estos mínimos me gustaría que alguien me explicara cómo es vivir acorde a nuestras posibilidades.

Todo este panorama ha dejado a los sindicatos frente al toro el 29 S convocando una huelga inevitable y que nadie sabía que perfil o carácter debía tener.

Fue una huelga no solo criticada por los oportunistas y por la derecha sino también por la propia izquierda donde muchos trabajadores se debatían entre la dualidad de pertenecer al sindicato y al partido.

La huelga tenía un perfil político porque los sindicatos se han quedad solos como vanguardia de las aspiraciones políticas del pueblo atónito ante las graves agresiones a que están siendo sometidos los intereses de los ciudadanos ante el nuevo fascismo europeo.

Pero la huelga tenía un perfil fundamentalmente económico ante mas 4 millones de parados, la pérdida del perder adquisitivo de todos los trabajadores, el deterior de los salarios, el aumento de la edad de jubilación, en definitiva por mantener los mínimos de supervivencia que hasta ahora hemos tenido a pesar de los que nos critican vivir por encima de nuestras posibilidades y que defenderlos hoy parece una quimera.

Los sindicatos han sido criticados duramente y es vergonzoso comprobar la saña con que se efectúan las criticas cuando se defiende, la mejora de las condiciones laborales, y se intenta frenar la explotación, mientras no se oye ninguna critica a las asociaciones de los empresarios capitalistas que por otro lado se asocian como clase aparte con lo cual queda totalmente definida y justificada la existencia de los sindicatos que tanto molestan y estorban.

Los capitalistas tienen sus interesas profesionales privados, tienen sus organizaciones económicas, tienen sus partidos políticos, sus medios de comunicación; todo destinado a fortalecer el capitalismo y no he visto ninguna crítica.

Lo único que se puede criticar a los sindicatos es lo mismo que debiéramos autocriticarnos nosotros como ciudadanos el conformismo y la falta de entrenamiento nos ha convertido y por extensión han convertido los sindicatos en organizaciones de mentalidad pequeño-burguesa, pero que en estos momentos han tenido que salir a la palestra ya que los partidos llamados de izquierda han abandonado de forma vergonzosa y vergonzante su principios éticos y morales.

Ante este panorama los ciudadanos y los sindicatos tendremos que preguntarnos ¿Cuáles son los nuevos problemas de la catástrofe que se avecina? ¿Cómo se deben afrontar y adaptar a las nuevas exigencias de la vida para participar activamente? O nos resignamos a que vivan peor nuestros hijos.

Cartas

Número de cartas: 45196

Número de cartas en Mayo: 38

Tribunas

Número de tribunas: 2040

Número de tribunas en Mayo: 2

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador