365 días de orgullo heterosexual
No tengo la menor duda de la falta del respeto personal, quizás no ideológico, que durante muchos años se tuvo hacia los verdaderos homosexuales. De todo ello debemos entristecernos por la injusticia que supuso.
Esto no da ningún derecho a esa representación manifiesta, “Día del orgullo gay”, irreverente, en mi opinión, hacia los homosexuales, que se realiza en diversas partes del mundo, no para pedir respeto a esos seres humanos, sino que pretende crear una multinacional estrafalaria que en absoluto respeta ni a los homosexuales ni a los heterosexuales. Parecen perseguir con las manifestaciones, apoyadas por multitud de títeres que se dicen tener esa condición, personajes, algunos ricos, que escenifican unos prototipos de seres estrafalarios, con extrañas vestimentas, con espectaculares musculaciones, con pinta de artificiales, con extraños maquillajes y ropajes estrambóticos, un poder grupal para influir en la destrucción del pensamiento tradicional cristiano: caridad universal, sí; alabanza del comportamiento, no.
Yo, en realidad, los respetables homosexuales que conozco no se diferencian demasiado de otras personas heterosexuales. Cuando yo vi filmaciones del poeta español García Lorca o del gran modisto Balenciaga, o según algunos dicen del actor Dirk Bogarde, no vi nada raro, aunque quizás tuvieron comportamientos sociales distintos. Algunos podían tener maneras diferentes, al parecer, más sensibles, pero nada de esas bufonadas que se representan el “Día del orgullo gay” en la calle por todo el mundo.
Esas escenificaciones incluso quieren hacernos pensar que son muchos, cantidades enormes de personas de esa condición. Pero estudios serios dicen que su número es mucho menos de alguna unidad %.
Sin embargo los días del orgullo heterosexual son todos los días del año y ,dentro de ese tiempo, un cierto número de hombres y mujeres tienen otro comportamiento, son homosexuales libres, y que solamente países totalitarios maltratan y persiguen. Que se condene ese totalitarismo y que nos deje en paz esa multinacional que persigue acciones contra la libertad y como una propaganda estrambótica y proselitista. Una prueba de ello es que se han apoderado del símbolo de Noé, el hombre que salvó según las Escrituras las parejas heterosexuales de todos los seres vivientes, el arco iris. Lo que es una falacia, que habría que prohibir.
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