Fútbol femenino, selección
Fue un bochorno, un partido para aburrirse como ostras, como en uno de solteros y casados; solo a sus mamás les debió de encantar.
No pueden dar esa imagen de peloteras sin mordiente, el fútbol es otra cosa. No se puede devaluar de ese modo y hacerlo tan pasmoso.
Sé que sus mamás estarán orgullosas, pero para ser sinceros entre todos, aburren a las piedras. Sí.
Para jugar pachangas que lo hagan en el parque al lado de su casa. Ellas no tienen la culpa, dan todo lo que tienen, a mí también me hubiera gustado ser un gran cantante, por eso decidí no abrumar a los demás con mis berridos.
El fútbol es capacidad de entrega y sacrificio; es correr, saltar y girar. Pero, todo ello debe ir acompañado de velocidad y dominio del balón, lo que llamamos calidad y técnica.
El reprís (acelerar mucho en poco espacio y tiempo) es esencial para practicar como profesional este deporte. Luego añadan: contacto, riesgo, garra, desborde, fuerza, habilidad, regate, pase, control... Pero, sobre todo espectáculo, si no hay espectáculo, no divierte; se convierte en una pachanga sin más, sobra.
El espectáculo viene dado por las condiciones individuales asociadas entre once actores de una misma comedia. Todo tiene que hacerse armonioso y ágil. Para eso está el entrenador, para armonizar a todos los componentes y formar una orquesta que deleite a los espectadores.
Es sencillo jugar y entretenerse entre amiguetes, por eso el fútbol tiene tantos seguidores, todos creemos estar capacitados para interpretarlo, lo difícil y complicado es deleitar y destacar. Es como cantar, todos lo hacemos, pero sabemos muy bien diferenciar cantos de juerga, al profesional. A ese que pagaríamos por escucharlo. En el fútbol pasa igual, yo no pagaría por ver pachangas.
No se lleva la sinceridad cuando hablamos de féminas en cualquier término, tenemos miedo, debemos caer bien o seremos tratados de machistas de mucho cuidado ¡Pues no! Todos debemos ser críticos leales con nuestros principios de evaluación sin cortapisas, lo contrario es elevar a importante lo mediocre.
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