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Estados Unidos y las torturas

29 de Octubre del 2010 - J. Jesús J. Suárez González (Gijón)

El sabado 23 de Octubre, Wikileaks, el sitio Web dedicado a difundir documentos filtrados e informes anónimos, que suelen poner a gobiernos e instituciones contra las cuerdas, ha dado a conocer, en rueda de prensa celebrada en Londres, el contenido de miles de documentos sobre la Guerra de Irak. Por los avances que ya se habían hecho públicos, sabíamos que se hablaría, como así ha sido, de los muchos miles de iraquíes muertos, la mayoría civiles, no reconocidos por el Gobierno títere de Irak ni por la administración norteamericana, y de las torturas y vejaciones que se han cometido, muchas de dominio público.

USA, que es una nación que está continuamente en guerra, ya practicó en otros conflictos la tortura sistemática y el asesinato de prisioneros. En Vietnam, por ejemplo, entre otras atrocidades, eran muy conocidos los "vuelos de la muerte" (después serían copiados por la criminal Junta Militar Argentina), los guerrilleros del Vietcong que caían apresados eran subidos a helicópteros y, en pleno vuelo, se les interrogaba (lo solía hacer un miembro de las tropas de Nguyen Cao Ky, mariscal jefe de las tropas del Sur, aliadas de EE UU), al que no hablaba, sin más, se le arrojaba vivo al vacío.

Es también muy conocido que los torturadores latinoamericanos fueron muchas veces asesorados por miembros de la inteligencia norteamericana. Las torturas con descargas eléctricas, sumergir la cabeza del prisionero en un barreño con aguas fecales, incluso la violación, también utilizando perros, de esposas en presencia de sus maridos detenidos, son cosas que a nosotros nos ponen los pelos de punta, pero de libro para estos criminales. Cuando hemos visto los premios que le han dado a Henry Kissinger y los besos que le prodigaba nuestro monarca nos daban arcadas, pues fue el organizador y consentidor de muchos de estos horrores.

Pero con el Gobierno de George Bush la tortura se planifica a una escala superior y se dan instrucciones desde las mas altas instancias del Gabinete USA como nunca antes se había hecho. Se organiza el centro de internamiento de Guantánamo, en Cuba, se monta, en la cárcel de Abu Ghraib, el complejo para los interrogatorios de soldados y civiles iraquíes, se acuerda con gobiernos amigos el traslado de presos a distintos países, Egipto, Jordania, Pakistán, Marruecos, Polonia, Rumanía, etc, donde serán torturados, y la mayoría asesinados, lejos de las leyes y legislación norteamericanas. Son tristemente conocidos los famosos "vuelos de la CIA", donde eran transportados secretamente los pobres desgraciados. En España también hicieron escala y era del conocimiento del Gobierno las actividades que se escondían dentro del fuselaje de esas aeronaves, pero, de forma cómplice, no se hizo nada. Teníamos un presidente, José María Aznar, que mandó a nuestras tropas a combatir contra la opinión de la inmensa mayoría del pueblo español, un presidente que, a pesar de los magníficos informes del Centro Nacional de Inteligencia (La Casa), proporcionados por los amigos espías sirios, mintió a los ciudadanos con el cuento chino de "las armas de destrucción masiva" y compadreó con los criminales. Pero los vuelos de la CIA continuaron durante la primera legislatura socialista de Zapatero, la gente que trabaja en el aeropuerto de Palma de Mallorca, por ejemplo, lo saben muy bien, y éste también los consintió.

Todavía es una incógnita hasta qué punto está el presidente Obama manchado de sangre, aunque prometió el cierre de Guantánamo, la cárcel de las jaulas a pleno sol sigue abierta. ¿Se atreverá a tirar de la manta y poner ante la Justicia de los EE UU a los criminales de la administración Bush?

Los españoles de bien no podemos ser aliados de gente como esta.

Eternamente gracias a los valientes de Wikileaks.

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