La Iglesia y sus enemigos
Ocurren cosas en la vida del hombre que no son fáciles de entender y comprender, como es el caso de la Santa Iglesia Católica, creada y fundada por el mismo Jesucristo Dios, para bien de todos los seres humanos de todos los tiempos que habitamos la Tierra.
Entre los miles de sacerdotes, religiosos y religiosas que pueblan nuestro planeta, surge un escándalo por reprobable y abominable que sea y en unas horas están en todos los medios de comunicación descalificando y escandalizándose de lo miserable y despreciable que es la Santa Iglesia Católica. Con el único fin de desprestigiar esta Santa Institución. Pues cuando ocurre en otras instituciones de prestigio, no se ataca a la institución, si no a quién cometió el delito y nunca con tanta virulencia como cuando se trata de un miembro de la Iglesia
Pero por mucho mal que a veces hacemos los que nos llamamos católicos y por mucho que persigan a la Santa Iglesia sus enemigos, ésta perdurará, no ya otros dos mil años, sino hasta e regreso en el final del mundo- de quién la fundó y dejó dicho que las puertas del infierno no prevalecerán contra ella. Mientras espera a su Señor, la Santa Iglesia se dedica, como su Fundador a pasar haciendo el bien. Recordemos que solamente una pequeña parte de ella, como es Caritas en España, está alimentando a 800.000 personas. Y no olvidemos que desde su fundación ha pasado haciendo el bien, ayudando al necesitado. Hoy en día, tiene fundados miles de colegios para los pobres del Tercer Mundo, les da de comer, les viste. Tiene asilos para ancianos desamparados, leproserías, hospitales especializados en los enfermos terminales del SIDA Allí donde no llega la solidaridad humana, llega la caridad de la Santa Madre Iglesia Católica, sin preguntar por las creencias ni por las ideologías políticas del ser humano al que cuida caritativamente, sin cobrar un duro todo con la única ayuda de los católicos-.
Por eso digo al principio que el hombre hace cosas difíciles de entender, porque odiar a una Institución que desde que ha sido creada, sólo lucho por hacer el bien a la humanidad es inconcebible. Pero es fácil disculpar a los que odian la Santa Madre Iglesia, pues éstos lo hacen por un solo motivo: ¡No conocen a Quién la fundó! Si lo conocieran amarían a su Fundador y a la Santa Madre Iglesia que Él fundó.
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