Ocho años de bombardeos en Yemen
Hoy, 26M, se cumplen ocho años de la última ofensiva de Arabia Saudí contra Yemen.
En el aniversario de la escalada del conflicto en Yemen, junto a ONG internacionales pedimos:
Que se detengan las exportaciones de armas a Arabia Saudita. La rendición de cuentas de los responsables que se benefician o alimentan el conflicto. La implicación de Europa en los crímenes de guerra en Yemen. Detener las exportaciones de armas y poner fin a la impunidad.
Hace ocho años, el 26 de marzo de 2015, la coalición militar liderada por Arabia Saudí lanzó la campaña aérea "Tormenta decisiva", intensificando el conflicto en Yemen y, con él, el sufrimiento de la población civil. En este aniversario de la campaña de bombardeos, 33 organizaciones están renovando su llamamiento para responsabilizar a los actores estatales europeos y a las empresas armamentísticas europeas por su participación en posibles crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Las organizaciones exigen que:
Las investigaciones sobre la responsabilidad penal de las autoridades europeas y las empresas de armas se lleven a cabo tanto a nivel nacional como, a nivel internacional, por la Corte Penal Internacional (CPI).
Las exportaciones de armas y el apoyo militar a Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, que continúan hasta el día de hoy, se detengan de inmediato.
Los procedimientos de concesión de licencias y las licencias de exportación también deben revisarse retroactivamente, ya que no se debe permitir que las licencias de exportación funcionen como autorizaciones para continuar con las violaciones de los derechos humanos con impunidad.
La comunidad internacional finalmente debe intervenir con decisión para evitar nuevas violaciones y enjuiciar a los actores que han cometido o contribuido a posibles crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad.
Con respecto a todas las partes beligerantes acusadas de violaciones de los derechos humanos, las Naciones Unidas deben establecer un mecanismo internacional de responsabilidad penal cuyo mandato incluya investigar las violaciones de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario y presentar informes públicos sobre la situación de los derechos humanos en Yemen, así como recopilar, preservar y analizar pruebas y crear archivos para futuros procesos penales.
Como las negociaciones para la continuación del alto el fuego de casi un año fracasaron en octubre de 2022, la espiral de violencia podría volver a escalar en cualquier momento, empeorando aún más la ya terrible situación de los civiles.
Hasta el día de hoy, el conflicto ya se ha cobrado más de 300.000 vidas y más de cuatro millones de personas han sido desplazadas internamente.
Más de 23 millones de yemeníes dependen de la ayuda humanitaria, pero el acceso a estas provisiones de ayuda, junto con agua, alimentos y suministros médicos, se ha visto obstaculizado por los daños a la infraestructura civil relacionados con el conflicto, así como por las acciones deliberadas de las partes en conflicto.
El bloqueo aéreo y marítimo saudita de Yemen ha tenido graves impactos en los derechos humanos de la población civil, mientras que el bombardeo de la infraestructura civil por parte de la coalición militar liderada por Arabia Saudita es una clara violación del derecho internacional.
Ya en 2019, el Centro Europeo de Derechos Constitucionales y Humanos (ECCHR), Mwatana for Human Rights, Amnistía Internacional, la Campaña contra el Comercio de Armas, Centre Delàs y Rete Disarmo presentaron conjuntamente una Comunicación a la CPI, reconstruyendo con precisión y detalle 26 ataques aéreos saudíes. contra civiles -en aparente violación del derecho internacional- en los que se desplegaron armamentos europeos.
Además, también se han presentado denuncias penales a nivel nacional.
A pesar de violaciones bien documentadas y pruebas claras de la participación de Europa en posibles crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad en Yemen, la impunidad continúa hasta el día de hoy.
La respuesta a la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania demuestra que la comunidad internacional es capaz de investigar posibles crímenes internacionales.
El pueblo de Yemen también merece el mismo grado de compromiso internacional en los esfuerzos por enjuiciar a los responsables de los graves crímenes y violaciones de derechos humanos que se han cometido y se están cometiendo contra ellos.
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