Javi Villamea: profesor, compañero y amigo
Hola Javi....
Hace unas horas me enteré de que te "habías ido" sin pasar por jefatura a verme, como hacías todos los días mientras estabas en el centro. Tampoco me contestaste al wasap que te mandé el domingo, contando todas las cosas que pasan por la tarde en el IES y preguntando cómo iba lo tuyo. Pero no le di mayor importancia, pues pensaba que volveríamos a verte por el centro.
Hoy es muy duro y difícil venir a trabajar para todos/as los que te conocíamos e incluso gente que únicamente oyó hablar de ti pero les llegó la "onda" de lo gran compañero, persona y amigo que eras.
Este año para mí ha sido el más triste desde que estoy en jefatura de estudios por la tarde, pues eché de menos tus visitas, al igual que eché de menos tus "tarteras de jabalí", que siempre hacías para toda le gente que te quería, y tan ricas estaban.
Has sido un luchador en todos los aspectos y duele ver que, después de esforzarte tanto para empezar una "nueva vida" aprobando la oposición (que tantas horas de estudio te supuso), trabajar al lado de casa, de un barrio donde todos te queríamos, tu flamante coche nuevo y sentirte bien por haber cumplido tu sueño de enseñar a ese alumnado que tanto te quería por esas clases "duras" pero a la vez cercanas que dabas, siempre preocupándote de intentar que todo estuviese bien en el aula... ahora te vas.
El vacío que dejas es irreparable, pero a la vez dejas un legado muy grande de compañerismo, trabajo, superación y cercanía. Nunca una mala cara, nunca una mala contestación, siempre esa sonrisa y cariño que eran tu seña de identidad.
Aquí queda triste este que llamabas cariñosamente "nenu", que pasaba todos los días un buen rato contigo charlando y disfrutando. Hoy me pillas "jodido", pero sé que nos vamos a volver a ver y volver a reírnos juntos. Eso me hace feliz y esperanzado.
Dicen que se va quien se olvida, y tú siempre estarás en nuestro recuerdo.
Un abrazo, amigo. No seas muy duro con tu nuevo alumnado, que seguro va a estar contento de tener un profe como tú.
Hasta siempre, amigo. No dudes que volveremos a encontrarnos. Mientras, intenta seguir con esa sonrisa que todos/as nos van a recordar a ti.
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