La Nueva España » Cartas de los lectores » Otro disgusto no tan futurista, así me siento

Otro disgusto no tan futurista, así me siento

4 de Mayo del 2023 - Pablo Sanz Martínez (Oviedo)

Soy una persona muy muy sensible. Muy joven todavía (no me dejan votar en las elecciones, ni opositar, ni abrir una cuenta bancaria, ni sacarme el carné de conducir), pero que ha crecido ya muchísimo. Soy una persona muy muy alta, pues mido ya más de dos metros. Y ese es mi gran problema, lo que me hace sentir fatal a diario. Porque siempre tengo que agacharme a cada puerta que me encuentro, que son muchas a lo largo del día. He intentado que, en máximo y obligado respeto a mis circunstancias, se tomaran medidas que aliviasen mi situación, pero sin éxito. Propuse al Ministerio de Industria que elaborasen una nueva normativa de obligado cumplimiento para modificar las dimensiones de todos los ascensores (no solo los de mi casa, instituto, etc.) exigiendo adaptar los ya existentes con puertas más altas y que en el futuro se fabriquen así. También los marcos de todas las puertas de todo espacio donde transito (bueno, también las demás personas, no solo yo). Y de los trenes y metros (como me dan miedo los aviones, allí no insistí). Todo me lo han negado. Me dicen, por ejemplo, que para los vagones del metro ello supondría tener que hacerlos más altos, y remodelar entonces todos los túneles de la red. Que si no me doy cuenta. Claro, les he dicho, pero es que me siento fatal, permanentemente humillade de tanto doblar la cerviz, que si es que no lo entienden, que por qué desprecian mis sentimientos con tanta ligereza... Nada de nada. Y me han mentido, porque sé que por Asturias están arreglado algo parecido. Pero no quiero resignarme, porque, como he dicho, soy muy joven todavía. Y valiente. Entonces se me ha ocurrido otra solución, aunque me gusta menos: que la sanidad pública cubra los gastos de una cirugía de extirpación de tres o cuatro vértebras de mi columna, para menguar un poco para poder adaptarme a esas dañinas dimensiones inmobiliarias y volver a pasear con la cabeza bien alta. He visto que cosas similares ya se pueden hacer en personas de nuestras edades, que viven otras situaciones de disgusto y sentires no valorados ni reconocidos. Así debería ser porque considero que es mi legítimo derecho, de obligado respeto hacia mi sagrado sentir, por encima de todo, para poder encontrarme plenamente integrade en la sociedad y poder caminar ya orgullosamente erguide y que así lo vean, aprecien, valoren, premien y linkeen todes les demás.

Cartas

Número de cartas: 49013

Número de cartas en Diciembre: 136

Tribunas

Número de tribunas: 2175

Número de tribunas en Diciembre: 3

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador