Siempre con la libertad de expresión
La libertad de expresión es lo que tiene, a nadie obligan a leer o tragarse lo que no se quiere escuchar. Eso sí, la libertad de expresión evita que quien quiera decir algo (incluso la mayor tontería) no pueda expresar su parecer. Lo decía Voltaire, o quien fuera el autor: "No estoy de acuerdo con lo que dice, pero defenderé con mi vida su derecho a decirlo".
Ya sabemos cómo es esto de la envidia, sabemos que quien dice está expuesto a la opinión y crítica de otros, de ahí que muchas veces las personas que mejor pudieran expresar pensamientos, ideas y reflexiones no estén dispuestas a que cualquier individuo pueda increparle simplemente por manifestar su opinión en público. Por eso animo a todos a opinar, más a las personas que piensen que pueden aportar a la sociedad y por temor a este tipo de censura se autocensuran a sí mismos.
Sean valientes, esperamos su aportación. No saben cuánta gente nos lee y nos felicitan. Muchos más que los que les molesta; estos solo tienen que pasar página y punto pelota. Decir no es catecismo y estar en posesión de la verdad, es su opinión simplemente, puede ser compartida o no; callarse por miedo a las críticas es de cobardes.
Para todos aquellos que les molesta que otros opinen, lo tienen sencillo, no leerles. Fácil, ¿verdad?
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