Solo importa el puestín
Los políticos no discuten programas, lo vemos con Sumar y Podemos, se pelean por coger sitio en las listas para seguir rucando. Les pasa descaradamente a estos dos partidos (bien partidos, aunque en realidad son lo mismo), pero igual a todos los demás.
No sabemos quién llevará las riendas económicas en el PP en caso (muy probable) de ganar, quiénes ocuparán las carteras de Trabajo, Hacienda, Cultura, Defensa, Interior, Sanidad... si Abascal será su vicepresidente (menuda representación de cara al exterior, supera al quitasueños de Pablo Iglesias en su día). Solo sabemos que Feijóo con el permiso de Ayuso será cabeza de lista hasta que ella decida como Pablo iglesias asaltar los cielos.
En el PSOE, después del varapalo de las últimas elecciones municipales y autonómicas, solo le vemos regalar promesas y promesas, decir que harán lo que en cinco años no les dio por hacer. No sabemos si Podemos y separatistas serán otra vez premiados para que Pedro siga reinando con su harén de mediocres.
Lo de Vox es aparte, están empeñados en deslumbrar con sus incongruentes y contradictorias propuestas, pasan del cielo al infierno sin posar los pies en el suelo, como quien pretende descaradamente aprovecharse de los desbarajustes de todos los demás. No cuenta.
Con este panorama solo echamos en falta personas serias, responsables, con experiencia laboral y de vida, con personalidad... En una palabra, gente madura con carisma y capaz.
Se necesita un giro en las políticas de sanidad, acabar con las listas de espera, en el Ministerio de Hacienda una lucha sin cuartel contra el fraude fiscal, la evasión de capital y las comunidades insolidarias con el resto. Qué decir de la conciliación familiar con respecto a guarderías de 0 a 3 años. Y unas residencias de ancianos asumibles y decentes. Construir viviendas públicas. Facilitar trámites para creación de empresas y apoyar a los emprendedores. Facilitar la creación de industria y puestos de trabajo dignos. Apostar por la reducción del gasto público en políticos y sus mamandurrias; ninguno se va, todos quedan colocados rucando de los impuestos de todos. Lo vemos ahora con las de Podemos, no las votaron y quieren todavía seguir ahí. No hay como un puestín público.
Creo que hay muchas cosa que hacer, empezar por lo urgente, luego lo importante, y si queda tiempo y dinero se hará todo lo que el anterior Gobierno se empeñó en perder el tiempo en ello.
Lo primordial está en el bien común, luego estarán las peculiaridades a resolver. Si le buscamos particularidad a todo, será un despropósito. Las desgracias, los delitos, los tarados, la anormalidad, la adicción, los regustos, las tendencias, las modas, los trastornos asumidos... la orientación de cada cual no puede tener rango de ley, ya que entonces tendremos que fabricar leyes como churros. Un despropósito en el que las de Podemos con su falta de experiencia nos introdujeron en la anterior legislatura.
Es todo cuestión de sentido común y ecuanimidad. Hay que descartar la autocensura en nombre del racismo, la xenofobia, el machismo, la homofobia... Es peor que la censura misma, será un sinvivir, todos tendremos razones para señalar por malos entendidos e interpretaciones personales. Cuidado con convertirnos en puritanos y moralistas rígidos, luego vienen las hogueras y la caza de brujas. Vamos para atrás.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo