Amigo Noel
Amigo Noel:
Sirva esta modesta carta como despedida.
La última vez que nos vimos estabas sentado con Menchu y la perrita en la plaza de San Miguel, pegamos la hebra y estuvimos casi una hora hablando de todo un poco.
Eras persona de carácter fuerte, pero noble, leal y servicial como nadie.
Cuántas parrafadas echamos en la farmacia a lo largo de los muchos años que fuiste cliente, paciente y confidente, sabías que la farmacia era como un confesionario, nosotros nos honrábamos con tu amistad incondicional.
Hasta tal punto llegó tu confianza en este humilde farmacéutico que voy a recordar una anécdota para que te rías un poco desde arriba.
Llegaste a la farmacia con una receta de un inhalador que tenía un aplicador de un mecanismo muy lioso y te empecé a explicar cómo utilizarlo, cargada una dosis, te dije, Noel (poniendo el inhalador en tus manos), aspira la dosis y por la noche aspiras otra tal como te he explicado, y así lo hiciste e inmediatamente me dijiste: muy bien, ya le explico yo a Menchu cómo lo tiene que hacer...
Pero hombre, Noel, cómo no me dijiste que era para Menchu, ahora te has tragado una cosa que no necesitabas... bueno, respirarás mejor unas horas. Su respuesta fue: "Lo que tú me digas... con los ojos cerrados".
Sé que estás en el cielo, pues tus profundas convicciones cristianas, tu gran fe y tu gran formación espiritual, unidas a tu bonhomía, te han hecho merecedor de ello.
Cuando hayas llegado a la puerta del cielo seguro que San Pedro te ha dado la bienvenida.
Amigo Noel, nos veremos de nuevo algún día, si no en el cielo (al que yo no entraré tan directo como tú), sí en el valle de Josafat.
Solo dejaste una cosa pendiente: siempre te animé a que publicaras ¡tus memorias! Que ya tenías escritas, y me decías que no podías hacerlo en vida.
Espero que tus hijos lo hagan pronto, será muy interesante leerlas y saber de tus numerosas
e interesantes vivencias, sobre todo para los que vivimos la Transición.
Un abrazo desde aquí abajo que seguro algún Ángel bondadoso te llevará.
Hasta siempre, Noel.
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