Hay miedo

3 de Julio del 2023 - Carlos Muñiz Cueto (Gijón)

El trabajo duro debería ser para las máquinas. Mi obsesión desde la infancia era eliminar a los trabajadores de las fábricas y lograr una sociedad sin miedo, con más cultura y trato cercano al disponer la gente de más tiempo para lo suyo. Pero quien da crédito para expandirse y decide quién debe contraerse y abortar ha procurado que no sea así. No hace muchos años mi oficina bancaria desapareció forzándome a ir a otra con la mitad de personal. “Anteayer”, al aparecer un cajero automático nuevo en dicha oficina, desaparecieron ventanilla, mostrador y la mitad de las cuatro personas que la atendían. “Ayer”, ese nuevo cajero automático desapareció también y al personal lo cambian constantemente. “Hoy”, me encuentro un cajero nuevo en el exterior que echa al cliente a la calle (donde ya no tiene acceso a ningún personal) y en él ya no se puede utilizar la libreta o cartilla de ahorro. Ahora la gente y el país se endeudan y no ahorran. Ese “poderoso poder” fuerza al sector servicios a que no se nos pueda atender de forma cercana y personal. Como consecuencia: hay miedo, y el miedo hace reaccionar a la gente de forma inesperada: hay más suicidios, se consumen más ansiolíticos que nunca, hay sobrepesos infantiles ligados a pantallas y a la inmovilidad relacional que provoca el miedo, hay más acosos y abusos juveniles... Hay miedo. La aberración del mal uso del móvil se ha instalado en la sociedad e ignoramos sus inestudiadas consecuencias sociales (como antes fue el tabaco y hace poco la gasolina y el CO2) pues resulta muy útil para hacer crecer las riquezas que crecen para ellos. Mientras unos se contraen y abortan, otros se expanden. La deuda de “independientes” países europeos que están dejando de usar libreta de ahorro crece, y cada vez se fabrican más móviles en fábricas sin luz de otros países. Arde Francia y la intolerancia y la intransigencia están presentes hasta para bendecir aguas en la bahía gijonesa dando comienzo a la alegría del verano. Nuestra otredad crece separándonos de los otros, y nos estamos convirtiendo en islas que odian y temen al otro. Nuestro corazón se turba con ese miedo y ponen nuestra esperanza en aislarnos con el móvil en su virtualidad, lo que eleva nuestra otredad. La esperanza la deberíamos poner en un sector servicios adecuado con relación personal cercana, directa, calma y estable, disponiendo siempre de suficiente personal. “Todo el mundo puede ver lo que ocurre en Europa y en el mundo en estos momentos: se construyen muros, se levantan barreras, se extienden cientos de kilómetros de alambre de púa, con el despiadado objetivo de cerrar el paso a una humanidad pobre y sufriente...” (Nuccio Ordine). Hay miedo porque los poderosos nos ponen barreras para la atención cercana y personal al cliente, y nos fuerzan a usar el móvil enriqueciéndose ellos. Se eleva así nuestra otredad y el sentimiento de odio y miedo a lo desconocido y desigual.

Cartas

Número de cartas: 49013

Número de cartas en Diciembre: 136

Tribunas

Número de tribunas: 2176

Número de tribunas en Diciembre: 4

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador