El deporte es saber y perder hasta por goleada
Hoy quiero plantear un tema donde me encuentro en franca minoría, a mí no me extraña nada, los que tenemos criterio propio solemos ir contra corriente, es menos problemático y conflictivo ir con lo que opina la mayoría.
Al grano: ¿ganar por goleada en el deporte es burlarse del contrario, o más bien es respetar la competición y también a ese adversario?
Todo viene por un niño que ganó por 31-0 (otras veces perdió su equipo por goleada también, no por tanto (13-1), ¿pero dónde estaría el limite?, ¿quién marcaría ese límite; llamémosle de abuso, pitorreo o burla? La discusión viene por los que defienden que a partir de cierto numero de goles, dicen sobre siete, tendrían que no pasar de medio campo, dejar al contrario meter algún gol, pasarse entre ellos el balón pero sin avanzar a la portería contraria -más o menos-.
Ahí es donde yo interpreto que faltarían el deporte de competición y se reirían del contrario de verdad. Cuando se compite en cualquier deporte, se debe hacer con entrega, respeto por el adversario y tratando de (en el caso del fútbol) meter los más goles posibles. Yo al menos prefiero un adversario que me gane por goleada a que se deje perder en mis propias narices, sentiría que siente pena de mí, y cuando estoy compitiendo no quiero penas ni regalos. En este caso yo me iría del campo, o del juego en cuestión.
Hablamos de niveles parejos y categorías iguales.
Los que defienden bajar el ritmo después de ir goleando están pidiendo falsear y adulterar dicho deporte. El fútbol consiste precisamente en meter el balón en la portería contraria cuantas veces puedas. Para ello, por supuesto, hay que entrenar mucho en la parte física, táctica, técnica, estratégica, también en lo mental. Aquí viene el problema, se meten a entrenar y jugar quienes no están preparados para enseñar y practicar fútbol de competición, pueden hacerlo perfectamente entre amigos, pero cuando entras a competir no hay lloros por perder. No es tan fácil como dicen algunos de solo pegarle patadas una pelota.
No buscar la portería contraria para no dañar al contrario es dañar al fútbol, al deporte y al contrario. Ya ven, yo lo veo así.
Dicen que los niños saldrán traumatizados por recibir semejante paliza deportiva. Lo decían también por un cachete por castigos o por educarlos con disciplina; pero la realidad es que los padres siguen educando a sus hijos fuera de esa ley mindungui. Les dan cachetes (los padres no maltratan, les duele más a ellos que a los niños), los castigan y les exigen disciplina, ¿saben por qué? Porque son sus padres, las personas que más los quieren y aman. Pues sí es así, y así es, todos lo sabemos, debemos enseñarles a saber perder y ganar, aunque sea por goleada. Deben acostumbrarse a una vida donde, después de faltar sus padres, nadie les regalará nada sin esfuerzo y preparación.
Respetar el deporte y a los competidores es tratar de ganar siempre, con ello no te burlas de nadie. Y cuando pierdes, felicitar al ganador y entrenar más y mejor para revertir la situación al próximo enfrentamiento.
Es mi opinión, no debe coincidir con la de nadie. Lo tengo asumido.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo

