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El cebro en el concejo de Castropol

1 de Diciembre del 2023 - Fernando Vijande Fernández (Castropol)

Hoy os voy hablar de un tema relacionado con mi antigua profesión y seguramente no tiene mucho interés.

Existe un bonito lugar con una sola casa que se llama Acebreiral. Está en la zona alta del municipio de Tapia de Casariego, limitando con San Cristóbal, que pertenece al municipio de Castropol.

Bueno, pues os preguntaréis de dónde le viene el nombre y parece ser que se refiere a un lugar donde abundaban los cebros.

El cebro era un animal parecido a un asno o caballo salvaje, aunque está extinguido desde el siglo XVI. Era un animal indomable, con una rapidez diabólica y se aprovechaba su carne para su consumo y su piel para hacer zapatos llamados cebrunos y también escudos usados en las guerras de la época.

El nombre de cebro proviene del latín de la palabra “equiferus”, que significa caballo salvaje, y derivó a lo largo del tiempo a cebro.

Hay diversos estudios sobre si es un asno o un caballo, aunque predomina la opción de un caballo, pues, relinchaba y solo lo pueden hacer los caballos o sus cruces.

También se perseguía a los cebros por los daños que causaban en los trigales de la época y porque cual Richard Gere cautivaba y secuestraba a las yeguas en celo de los corrales.

Abundaba mucho el cebro en la Edad Media en toda la península Ibérica y a partir del reinado de Felipe II se extinguió, primero en zonas de Asturias , Galicia y León y posteriormente en toda España.

Cuando los portugueses navegaron por la costa de África encontraron en la hoy Sudáfrica una especie de gacela con rayas que les recordaba al cebro de la península Ibérica y la bautizaron con el nombre de cebra. Posteriormente a todos los animales con rayas se les llamó cebras.

Esta noche soñé con un cebro que desde el Acebreiral bajaba a toda velocidad pasando por San Cristóbal, la capilla de San Lázaro con su malatería y pasando por la puebla de Revoredo secuestraba una yegua que tiene el Moro al lado de mi casa. Los golpes de sus cascos, al despertarme, se transformaron en ruidos de golpes que daban los cubos contra el camión de la basura.

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