Premio a la promoción de los DD HH en Asturias
La periodista Arantxa Nieto fue la encargada de presentar y conducir el acto de entrega del Premio, que en su segunda edición gestiona la Axencia Asturiana de Cooperación, con destino este año para Colombia.
Un coloquio en torno a periodismo y DD HH servía para que Mónica García Prieto y el director de la revista 5W, Agus González, respondieran a preguntas e inquietudes de la también periodista de RTPA Begoña Urbón.
Por parte de la entidad premiada llegaba a nuestra tierra la joven abogada Daniela Rodríguez, que ha proyectado un vídeo corto para ubicar su organización, la Fundación Comité de Solidaridad con los Presos Políticos de Colombia, que está cumpliendo 50 años (y contribuyó a sus inicios el importe de otro premio recibido por el Nobel de Literatura G. García Márquez).
El CSPP hace parte del comité de selección del PAV-DD HH (programa asturiano de atención a víctimas de la violencia en Colombia, que cumplió 23 años, 19 visitas al terreno, 140 personas acogidas...).
Sus abogadas son las que preparan y organizan la entrada a las cárceles de las delegaciones asturianas. A propuesta del CSPP seguramente que se conforma el mayor número de personas defensoras de entre las que llegan a la protección del PAV-astur.
Una de ellas fue Luciano Romero, que fue asesinado a su regreso a Valledupar, y que da nombre al colectivo de refugio en Asturias.
Una de las activistas veteranas que han tenido la máxima colaboración con el programa asturiano es Flor Múnera.
Ella recibió el premio nacional a los DD HH, que auspicia Diakonia -de la Iglesia sueca-. “Florsita” no es abogada sino enfermera, y ha acompañado a la delegación asturiana a visitar presos políticos en las cárceles más duras del país, como la “Picaleña” de su departamento natal, Tolima.
El CSPP maneja la interlocución oficial con penitenciarias, y emite informes exhaustivos sobre cárceles que son defendidas ante el Congreso.
Es lo que ocurría este año tras la visita a la cárcel de la Picota en compañía de la abogada Angie Gordillo y de Daniel Echeverri. Dos días después el jovencísimo abogado del CSPP Daniel Echeverri intervenía en el Senado para defender una reforma carcelaria en profundidad.
Otras candidaturas nominadas al premio a la promoción de los DD HH son la abogada peruana Mirtha Vásquez y el defensor maya guatemalteco Bernardo Caal (solo que esta propuesta no fue considerada por el jurado por llegar unas horas tarde al registro).
Bernardo es un maestro al que su comunidad le encargó defender el territorio frente a una apropiación indebida de empresas extranjeras.
El despojo del derecho al agua del río Cahabón afecta a 29.000 personas indígenas.
Por ello fue perseguido y pagó cuatro años de injusta prisión.
El caso mediático de Bernardo y su historia tuvieron un efecto mariposa en la reacción del público ante estas injusticias. En un país lastrado por la desigualdad, donde la pobreza afecta a cerca del 60% de la población y la desnutrición, al 40% de las y los menores, la indignación ante la corrupción y la impunidad ha llevado a la ciudadanía a tomar la calle para protestar. Y llevan muchas semanas en ello, esta vez por el intento de golpe de Estado ante la votación presidencial del sociólogo Bernardo Arévalo, que debiera tomar posesión en enero.
Mirtha Esther Vásquez Chuquilín, de Cajamarca, tiene una larga trayectoria como defensora, ejerciendo también como letrada en el caso de doña Máxima Acuña, premio Goldman ambiental de California en 2016 (“La Hija de la Laguna”, película proyectada en Asturias), conocida por su resistencia a ser desplazada de sus tierras por la explotación minera estadounidense Yanacocha.
También ha sido diputada por Cajamarca y presidenta del Congreso, ya ha presidido unos meses el Consejo de Ministros del Perú.
Ha sido docente de la Universidad Nacional de Cajamarca, y ha sido abogada y secretaria ejecutiva de Grufides (que trabaja por la defensa de los derechos humanos y el medio ambiente, enfatizando la sostenibilidad ecológica, el derecho al agua, la economía solidaria, la equidad de género y el diálogo intergeneracional, como parte de la construcción del buen vivir.) y de Aprodeh (Asociación Pro DD HH, de larga trayectoria en el país que hace parte de FIDH y de OMCT), dos instancias de prestigio en la defensa de los DD HH.
Ha formado parte de la Coordinadora Nacional de DD HH.
Su trayectoria, pues, como defensora ambientalista, defensora de las comunidades, y su aporte a la defensa de doña Máxima Acuña (quien en su desamparo ante la empresa minera, y el conflicto en el que murieron 5 personas indígenas y varios cientos fueron judicializadas, logró con el apoyo jurídico de Grufides varios triunfos judiciales para permanecer en la tierra de la que pretendían despojarla), le han significado un alto grado de persecución por parte de las corporaciones mineras. Sin embargo ha tenido también el reconocimiento para estar un breve tiempo en la representación parlamentaria, logrando presentar numerosas iniciativas ambientalistas, y presidiendo el Congreso de forma interina, hasta ser llamada a presidir el Consejo de Ministros por pocos meses.
Una delegación asturiana que participó en el Foro Social PanAmazónico de Tarapoto pudo comprobar el trabajo colectivo de las defensoras peruanas, y en particular de Mirtha Vásquez, en las tareas del Foro y en la defensa de los territorios comunitarios.
Allí organizaron un Tribunal: Justicia y Defensa de los Derechos de las Mujeres Panamazónicas y Andinas, que tras sesionar con testigos, defensa y peritajes, y con un jurado compuesto por integrado por Gladys Acosta (Comité de la ONU sobre la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer), Lilian Celiberti (Articulación Feminista Marcosur), Rita Segato (Universidad de Brasilia y Consejo Nacional de Investigaciones Científicas de Brasil) y Teresita Antazú (Unión de Nacionalidades Ashaninka y Yanesha) sentenciaba varios de los casos emblemáticos, como el de Berta Cáceres en Honduras, Lorenza Cayuhuan en Chile , los Nankints-Tsuntsuim del Pueblo Shuar del Ecuador, la represa de Belo Monte expuesto por las defensoras del Movimiento Xingu Vivo para Siempre, Brasil, y el de doña Máxima Acuña en Perú.
Hoy, en el palacio Conde Toreno, el coloquio periodístico y la intervención de la conseyera Melania Álvarez abarcaron inevitablemente el exterminio palestino en curso.
Cómo contar o cómo ocultar el horror del genocidio infanticida, cuando, según el Euro-Med Monitor HR, son ya 86 los periodistas asesinados.
“El espanto” de Gaza, con demostrado ataque premeditado a sus periodistas eliminados con todas sus familias, según Mónica G. P. no puede producir ningún error de contexto: el agresor es Israel, el agredido es el pueblo palestino, y además hay una “obligación legal” de los estados de proteger.
Si se sigue produciendo es porque a Israel le sale gratis asesinar periodistas, doctores, catedráticos, funcionarias de la ONU, poetisas.
Precisamente el miércoles la Universidad de Oviedo acoge el testimonio de otro periodista de guerra, Fran Sevilla. Y el jueves habrá juntanza de periodistas, para ver si hay posición común contra el silencio, y contra la complicidad con el relato sionista.
A Mónica eso sí le produce perplejidad: compañeros suyos que se han pronunciado abiertamente o han realizado campañas para acompañar a víctimas de la guerra en Ucrania, pero que ante la agresión y destrucción de Palestina no se deciden a informar adecuada y éticamente.
Hoy, 11-D también se cumplían 45 años de la muerte en combate a la dictadura somocista de Nicaragua del cura guerrillero de la cuenca minera Gaspar García Laviana.
Los actos en su Memoria se celebraban ayer en Xixón y anteayer en Tuilla-Langreo, y en ellas se reafirmaba el carácter internacionalista de lucha contra las desigualdades de Gaspar.
Silvia Quesada y Alfredo González, finalmente, ponían música y canto al aniversario 75.º de la Declaración de los DD HH.
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