¿En qué ambiente desearíamos vivir?
Las noticias de cada día me queman las tripas, aunque pueda usar alguna buena noticia como compresa fría. Violaciones sin freno, el que asesina a su mujer, el que mata a su madre, el hombre que mata a su hijo porque es lo que más quiere su exmujer... En fin, me parece algo tan infinitamente monstruoso que me hace ver a los animales como criaturas superiores a una parte de esta humanidad.
Esas cosas no sucedían antes, es que ni siquiera se concebían. Sé que alguien podría objetar señalando las barbaridades del régimen nazi, por ejemplo. Ahora mismo estamos padeciendo la invasión rusa de Ucrania, o la guerra de Israel contra sus enemigos palestinos, sin que importen las víctimas civiles, pero es difícil suponer que un soldado se vea a sí mismo entrampado por su gobierno, que además está generalmente apoyado por la religión oficial, otra cosa son los políticos que barren las almas humanas como las hojas caídas del otoño. Sí, limpian su camino a cualquier precio.
Pero... es que lo que no tiene parangón es cómo ha evolucionado el comportamiento humano de la sociedad en una medida que ya asusta. El fulano que va con su coche a toda velocidad en una urbanización que pide no superar los 30 km/h es un asesino potencial. La persona mayor que se rompe la cadera por pisar una mierda de perro o el confiado abuelo al que casi tira el patinete venido por detrás sin avisar no recordaran sucesos similares en su juventud.
Y... me había propuesto no mencionar el tabaco, pero... os cuento lo del otro día: un joven me para en la calle y me pide dinero para tabaco, le digo que si es para un café o un bocadillo se lo doy, pero para tabaco no. Le pregunto si conoce los venenos que produce a fumadores activos y pasivos, me contesta que sí.
-¿Y bien?
-¿Me da o no el dinero?
-No.
¿Y si se proyectase una asignatura sobre valores humanos en el instituto, aunque fuera a cambio de la promoción sexual que adelanta el sexo a una edad irresponsable con víctimas inocentes, y jóvenes marcadas de por vida? Valores... principios... ética. “Entonces tú entenderás lo que es justo, recto, e imparcial” (Proverbios 2: 9-15).
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