Retroceso de libertades
Aquí todo empezó con Zapatero, lo siguieron el feminismo rancio y acomplejado, lo culminó Podemos y ahora el Sanchismo lo remató. Estamos ante la dictadura de las ofensas por todo, la censura sin límite que coarta libertades, ideas, expresiones y pensamientos.
Es una ideología determinada que invadió España y se propaga por todo el planeta, aquí nadie empezó a querer acomplejarse de repente, como bien dicen los Hombres G. Aquí nos dejamos seducir por esa ideología feminista, ecologista, animalista... Cargada de prejuicios y normas distorsionadas coactivas donde aquellas libertades que acogimos todos y todas después de la dictadura con la Transición, con mucha ilusión, ganas y explosión de ser libres y volar sin cortapisas; ahora se reduce a censura por todo, ni se puede hablar, componer, crear y decir por miedo a molestar a gais, lesbianas, animalistas, feministas, trans, altos, bajos, feas o guapas, blancos o negros. En fin, agárrense que vienen curvas.
Están cortando de raíz la libertad de expresión, la libertad de pensamiento, de alguna manera nos dictan lo que debemos hacer, cuándo lo debemos hacer y con quién lo debemos hacer, una dictadura en toda regla camuflada bajo un complejo general donde se llega a confundir y mezclar ficción con realidad. Hablar con eufemismos no quiere decir que no tenga el mismo significado cuando se trata de despreciar, insultar o abusar.
Como bien dicen los Hombres G, antes era todo lo contrario, aquellas ganas de expresarse, de salir, de divertirse, de crear, todos tenían ganas de explotar su creatividad, de hacer lo que les saliera de la gana sin pensar que ofendían a un gay, un etéreo, una vaca, una mujer o una gallina... en fin, ustedes mismos.
Ahora no solo ofendes a alguien en concreto por error, también lo elevan a un imperdonable, detestable y condenable comportamiento: racista, homófobo, xenófobo, machista, fachista, misógino... Llegará un momento que no se podrá hablar, cantar o escribir, cualquier cosa tendrá tintes de ofensa sobre algo o alguien.
Aquellas canciones que fueron éxito, hoy no tendrían más que crítica e incluso denuncia por parte de quién "Piensa ladrón que todos son de su condición" por ejemplo: "Quince años tiene mi amor", "La Ramona", "Brown Sugar", "Quédate en Madrid", "El negro no puede", "Sí, si", "La mataré", "Indiana o devuélveme a mi chica"... En fin, les recuerdo que una canción es ficción, no intención o realidad. Vamos para atrás. Pero curioso, esas mismas que prohibirían un amor quinceañero, hablan de que los menores (niños, niñas y niñes) puedan tener sexo consentido con quien sea. Esa mismas que están en contra del maltrato animal por ser seres sintientes, son quienes defienden el aborto sin supuestos diciendo que el feto es cuerpo de la madre y que tiene derecho a no permitirlo nacer. Me perdonarán, pero no puedo con tanta contradicción.
Hay que frenar esta deriva contra la libertad. Antes, se reían los tartamudos, gays y leperos de los chiste de Arévalo, ahora sería condenado a la hoguera por la sensiblería, puritanismo y moralinas de quien sin haber vivido impide vivir a los demás en plena libertad. No se trata de ir insultando, se trata de no sentirse insultado por todo.
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