Diario de un tirano
Todo régimen económico o político se sustenta en tres pilares desde la época del califato cordobés: un pilar económico, otro administrativo y otro político.
De estos poderes, el pueblo o masa solo ve uno, el político, pero desconoce quién lo sostiene; el administrativo está compuesto por jueces, letrados y consejeros.
El económico, en las grandes familias, que a base de donaciones anónimas a los otros dos van corrompiendo el pensamiento, de los otros dos e incluso del pueblo.
Vamos con un ejemplo que le va a gustar a la masa. Rusia tiene la revolución, pero hoy por hoy y nunca dejó de tener un régimen que en principio gira alrededor de una persona.
¿Cómo se sostiene eso? Pues muy sencillo: las familias que palmeaban o asesoraban a los asesores visibles de los zares son las mismas que pasaron de manejar el régimen zarista a manejar el soviético y luego el que siguió a este.
Así que pretender cambiar un régimen desde fuera y a las bravas sin diplomacia ni sobornos a esta clase es como querer destruir un hongo eliminando la seta; si es fuerte, siempre volverá a surgir gracias a sus raíces, que se sostienen por todo el bosque.
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