Asistencia médica a los ancianos: un llamamiento urgente
Trabajo en una clínica dental y el otro día nos visitó una señora de 90 años, que vino con su marido. El señor nos comentó que quería pagar lo menos posible por la prótesis de su mujer. Inicialmente pensé: "Ostras, ¿por qué no quiere invertir lo que tiene en hacer la vida más fácil a su señora?".
Cuando me pagó, me dijo en voz baja: "Nosotros no tenemos a nadie que nos ayude, ni siquiera el gobierno. He ido a vivir con mi mujer a la residencia porque no me puedo permitir a nadie que la cuide, ni pagar un piso y una residencia a la vez, y mucho menos costear una residencia que supere los 5.000 mensuales entre los dos". Me quedé helada, ahora todo tenía sentido. Sin ninguna ayuda, ¿cómo se pueden pagar una prótesis nueva? Algo no va bien, me sentí muy triste y me pregunté si en un futuro yo tendría los problemas de esta pareja.
En nuestro país hay varios factores que contribuyen a este problema: las pensiones insuficientes que a veces no cubren los gastos médicos, los costes de los servicios médicos privados son elevados y los jubilados no tienen recursos, las políticas sociales son inexistentes en cuanto a la ayuda de las personas grandes. Otro factor que ha influido es el cambio en la dinámica familiar, están más solos y sin el apoyo de la familia.
Si pensamos que pronto la población jubilada superará a los jóvenes, ¿quiénes sostendrán nuestra sociedad?
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo