Ortografía

15 de Junio del 2024 - José Antonio de Lillo Cuadrado (Oviedo)

La llegada de las libélulas de proximidad y las mimosas sostenibles, que piensan en amarillo, viene a anunciar los exámenes de la EBAU, palabra cacofónica donde las haya. Por otra parte, están la lluvia y el sol que no acaban de ponerse de acuerdo: que si yo lluevo por la mañana, que si tú asoleyas por la tarde tu vestido de lujo azul. Pero estamos en Asturias y el reloj del tiempo marca la hora con toda puntualidad. Por esto vivimos rodeados de un discreto sol y del envidiado y jugoso verdor de esta región.

Pero no todo es lluvia, sol, libélulas, cielo azul o mimosas. Desde el final del invierno y la llegada de la primavera se viene hablando y escribiendo de exámenes, concretamente de la EBAU, nombre que cambia según el sistema educativo en vigor y que, por otra parte, ofende la vista, el gusto y el oído de quienes lo leen, lo pronuncian o lo oyen. En aquellos tiempos, esta prueba llevaba un nombre mucho más serio, más noble, más solemne: "Examen de Estado", que rubricaba "siete años" de Bachiller. Estos días dijo un canal de TV que el próximo curso regresaría la PAU.

En ese fin de invierno e inicio de primavera, LA NUEVA ESPAÑA publicaba algunas informaciones relacionadas con este examen (EBAU): horas y días de los exámenes, tasa que deberán pagar los alumnos por cada falta de ortografía y "El Principado apoya que la EBAU penalice las faltas de ortografía". Sorprende que se hable ahora de que hay que castigar las faltas de ortografía. ¡Los acentos ya se multaban en el Paleolítico Inferior!

Quienes peinan canas recordarán que en aquel Ingreso de Bachiller ya se "penalizaba" la falta de acentos: tres ausencias de la tilde se premiaban con un "vuelva usted mañana", o sea, nos veremos en septiembre. Sería largo enumerar lo que habían estudiado aquellos guajes para el Ingreso. Solo un ejemplo: de Geografía, todo el globo: ríos, cabos, islas, penínsulas, golfos… No se oía decir, como hoy, que la capital de Asturias es Almería o que el Ebro nace en Galicia, disparates que celebran los interrogados con carcajadas estentóreas cuando un micro les pregunta sobre esta materia.

Una lengua tiene muchos recovecos en su archivo particular. Entre ellos, los acentos (las tildes) no están más que para distinguir palabras tónicas y átonas, y con ello, su sentido, como sucede en "intérprete", "interprete", "interpreté". Los latinos no tenían tilde, pero sí una forma de distinguir formas tónicas de átonas. Cuando esta lengua empezó a desintegrarse, cada territorio se arregló como pudo. El castellano adoptó la tilde, que distingue las sílabas tónicas de las átonas. Los acentos (tildes) tienen como fin evitar la evaporación del sentido de un enunciado. Estas inofensivas minucias, las tildes, son el coco de los estudiantes y de otros muchos que ya no lo son. Además de las tildes, están al acecho "h", "b/v", "j/g". También habría que hablar de la puntuación, pero la dejamos para cuando empiecen a caer las hojas de los árboles. Comentar otros errores alargaría este escrito y, a lo mejor, metería el miedo en el cuerpo de aquellos que tienen que volver en septiembre, invitados por el "vuelva usted mañana".

Las Matemáticas dejaron este año bastantes heridos por un error. Esperemos que no vuelvan en septiembre. Estarán vigilantes Euclides, Arquímedes, Eratóstenes, Hipatia, Tales de Mileto… para que no se repita semejante dislate.

Cartas

Número de cartas: 45539

Número de cartas en Junio: 166

Tribunas

Número de tribunas: 2067

Número de tribunas en Junio: 10

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador