Ni Feijóo ni el que escribe salimos de nuestro asombro
A pesar de que cerramos 2023 con un 3,6% de déficit público (el límite era un 3%), Pedro Sánchez ha conseguido que la Comisión perdone a España y no la sancione incluyéndola en el llamado "Procedimiento de déficit excesivo", que obliga a recortar gastos y aumentar ingresos, y en el que sí están Francia, Italia, Hungría, Malta, Polonia, Eslovaquia y Bélgica. Discriminación positiva, lo llamamos.
Feijóo ya puede ir despidiéndose del hipotético (ahora utópico) apoyo de Europa contra la "ley de amnistía" y la mediación en el espinoso y eterno bloqueo del Poder Judicial... ¡y no te cuento si Teresa Ribera sale comisaria de Medio Ambiente!
En este orden de cosas, es fácil imaginarse a Ayuso y a Camps al frente del PP, porque el "galleguismo" claudicante del peso mosca Feijóo no da para fulminar a Atila Sánchez Castejón ni en sueños.
Los socialistas lo saben y ponen en práctica lo aprendido de los negociadores independentistas, "disparando" siempre más alto que el objetivo.
Para pasmo del personal, un ejemplo reciente de prepotencia, desprecio y arrogancia socialista es la exigencia que hace a los populares la ministra María Jesús Montero, una apologista obvia del Gobierno (más concretamente, de Sánchez), para que se hinquen de rodillas, entonen el mea culpa y pidan perdón por el daño causado con los ERE de Andalucía, ¡el daño causado por el PP en los ERE!, el mayor caso de corrupción en la historia de España.
Pero vamos a ver: los más de quinientos imputados, los casi mil millones de euros malversados en ayudas millonarias a empresas afines al PSOE-A, las subvenciones dilapidadas en prostíbulos y cocaína, las comisiones ilegales a sindicatos, los millones estafados a los trabajadores, los casos de socialistas juzgados, sentenciados (y probablemente amnistiados)... ¿son cosa del PP?
Esta superestafa, atinadamente conocida como "caso de los fondos de reptiles", ¿no fue gestionada y ejecutada por "reptiles" socialistas?
Aunque estaba seguro de que el fango, los bulos y demás quincalla argumental del laboratorio de frases de la Moncloa habían acontecido con el Gobierno de Zapatero, reconozco haber tenido que consultarlo en la Wiki (lo han conseguido), para confirmar fechas y personajes.
De paso, he refrescado algún dato más. Por ejemplo, que la consejera de Hacienda de la Junta de Andalucía era la "exigente" M.ª Jesús Montero.
También me entero de que, en 2019, el Gobierno de España, con Pedro Sánchez de titular, intervino financieramente a la Junta de Andalucía, presidida entonces por Susana Díaz, por incumplir la Ley Orgánica 2/2012, de 27 de abril, de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera.
¿Quién cree que elaboró esas cuentas? Bingo: la que por entonces era su consejera de Hacienda, la "exigente" María Jesús Montero.
Ante curriculum tan impresionante de la sevillana "exigente", en junio de 2018 fue recompensada por los servicios prestados con la cartera de ministra de Hacienda. Asimismo, es vicesecretaria general del PSOE desde julio de 2022. Un carrerón, oiga.
Algo grave se está cociendo entre esta panda de vagos inactivos, porque las declaraciones extemporáneas de la bullanguera ministra son inentendibles y suponen tormentas inexplicadas.
Más fácil si seguimos a Voltaire: "La política es el camino para que los hombres sin principios puedan dirigir a los hombres sin memoria".
Saludos cordiales.
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