Menú del día
Ayer fui a comer al bar de toda la vida, aquel que desde pequeña siempre ha sido un punto de encuentro de la gente del barrio, un lugar donde todo el mundo se conoce y donde, hasta hace poco, podías disfrutar de un buen "menú del día" por solo 10 euros. Un ritual casi sagrado, sentarte y dejarte sorprender por los platos caseros de siempre. Ayer esto cambió, porque con cierta tristeza vi que también habían subido el precio del menú. La inflación ha acabado afectando incluso a los espacios más arraigados en nuestra rutina, haciendo que estos símbolos culturales cotidianos y representativos se figuren ya como una verdadera excepción. Es una pérdida pequeña pero simbólica, que nos muestra cómo lo que antes era un gesto sencillo se está convirtiendo en un auténtico privilegio. Poco a poco nos alejamos de esos pequeños rituales que tan bien identifican la vida de barrio, donde la cercanía y la sencillez solían ser el mayor lujo.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo