¿Justicia para Melody?
La reciente polémica de Eurovisión ha vuelto a sacudir a la opinión pública. Melody, una artista querida y con una trayectoria más que consolidada, ha sido apartada de una oportunidad que muchos consideraban merecida. ¿Por qué? ¿Por criterios estéticos? ¿Por no encajar con la narrativa moderna que prima el personaje sobre la voz?
El festival, que en teoría defiende la diversidad y la justicia artística, parece haberse rendido a las modas pasajeras y a intereses editoriales que poco tienen que ver con el talento. ¿Dónde queda la música? ¿Dónde el mérito? Nos guste o no, la exclusión de Melody pone sobre la mesa una dura realidad: cada vez importan menos los méritos y más las etiquetas.
Eurovisión debería ser un espacio que celebre el arte, la voz, la entrega. No una pasarela política ni una plataforma de marketing.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo

