Sahara a los 52
Por la mañana Palestina en Mieres en formato de manifestación. Por la tarde Sahara en Xixón en términos de conmemoración, cultura y fiesta.
Intentaron hacerlo en Oviedo, pero no les cedieron ningún local adecuado, así que, de nuevo, en la Casa Sindical (como cuando recibieron a Sultana Jaya). Y esta vez un 24 de mayo para celebrar un 20 de mayo de hace 52 años.
¿Qué ocurrió en esa fecha? Se considera el inicio de las acciones de liberación del Polisario. ¿De liberación de quién? De la colonia española, que tenía y sigue teniendo, 52 años después, la responsabilidad de la descolonización del Sahara.
El organizador es el Cosara, que significa Comunidad Saharaui Residente en Asturias. Y da idea del arraigo de esta diáspora saharaui el que, desde cada comarca asturiana, estas personas residentes aportaran hoy sus propias danzas, representaciones y músicas, desde Langreo, desde Oviedo, desde Grao, desde Xixón.
Que sus niñas y niños se disfrazaran dizque con los harapos de los uniformes de aquella guerrillerada del siglo XX, que, si bien no tuvo muchas escaramuzas con los militares españoles (y más bien había cierta entente cordial por la promesa que había de efectuar la verdadera descolonización), supuso el germen de lo que sería y es ahora el movimiento de liberación saharaui, el Frente Polisario, que significa Frente para la Liberación de Saguía el Hamra y Río de Oro, nombre de la época de los territorios colonizados.
Era 20 de mayo de 1973. Aquí teníamos la dictadura franquista. El Polisario se había ya fundado antes, e incluso un líder, Mohamed Sidi Brahim Basir, había sido desaparecido por la Policía territorial española en 1970.
Así que estudiantes, trabajadores y soldados saharauis se juntaron y fundaron el Frente Polisario, con Brahim Gali como su primer secretario general.
Luego llegaría noviembre de 1975 y la traición franquista. Pero de ello se volverá a hablar, ya que se cumplen 50 años redondos.
Y la guerra de guerrillas que había comenzado contra la colonia española se prolongaría contra el ocupante Marruecos hasta que en 1991 se firma un alto el fuego, con largos años de nuevas traiciones a lo acordado: que habría un referéndum para conocer si se optaba o no por la autodeterminación. Marruecos lo ha impedido siempre, y en 2020 el Polisario, su ejército y su República en el exilio argelino reanudan las guerrillas contra el ocupante.
Suponemos que de todo han hablado un anciano y una anciana hoy en Xixón. Lo suponemos porque lo dijeron en hassanía, pero algo nos comentaron en castellano sus compañeras.
El señor, excombatiente y con la mandíbula todavía destrozada por una bala. La señora, dizque una especie de enlace y de informadora para la incipiente guerrilla polisaria.
Es la historia de un pueblo, herido y traicionado, que sigue acumulando esfuerzos, cultura, historia, legado de las aspiraciones de libertad.
Y se lo han contado entre sí a sus nuevas generaciones de cachorras y cachorros polisarios, y a un puñado de asturianas, que también, en amplitud, debieran asumir la historia de las solidaridades, fuertes y continuadas, entre los pueblos saharaui y asturiano.
Al escuchar a la anciana y al anciano, sus vivencias de hace más de medio siglo, las podíamos compaginar con nuestras propias experiencias. En aquel tiempo los habitantes de la colonia saharaui eran españoles legales. Como tales, y como hacía falta mano de obra para las minas, pues fueron a buscarlos. Con 35 de ellos compartimos aquella escasa formación de unas horas en el Trabanquín, para enseguida ponernos a arrancar carbón en el pozu Sotón. Pocos meses después, con la ya citada traición franquista, el Polisario lanzaba su llamada, y todos ellos regresaron a la lucha de liberación y cambiaron el martillo de picar por el fusil polisario.
"Sahara Libertad, Polisario Vencerá", siguen y seguimos gritando en las movilizaciones. Una de las niñas ha recordado el porqué: fue una promesa, lo estipula Naciones Unidas, y debe cumplirse.
Y luego... Mohamed Emberek, que además de presidente de Cosara es un magnífico cantante, dinamizaba a la guitarra con las canciones polisarias, con las fotos de los presos políticos saharauis en las cárceles marroquíes al fondo.
Dos días antes Mohamed Halí, joven saharaui defensor de los DD HH, había recibido en Irlanda el premio de Front Line Defenders. Durante años ha sido privado arbitrariamente de su derecho a ejercer como abogado en el sistema judicial marroquí, para evitar que defienda a la población saharaui de las violaciones cotidianas que sufren por el ocupante de sus tierras.
Por la mañana Palestina en Mieres, por la tarde Sahara en Xixón: cuando se reporta que militares sionistas israelíes están asesorando (maniobras conjuntas) a los militares marroquíes, para ejercer con mayor precisión su represión "probada en combate" por el sionismo contra los palestinos.
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