Unas líneas para los casi siempre olvidados nuestros mayores
"La Fundación Municipal de Servicios Sociales luchará contra la soledad no deseada en Gijón", portada en la prensa asturiana de Gijón del sábado 9 de abril de 2025.
Yo sé cuántos ancianos hay solos en Gijón y en otras ciudades de Asturias y qué habéis hecho con ellos, nada, en especial en época de esa rara pandemia ocurrida en 2020. Ahora os importa, como dicen los ingleses, "fuck all", ni un huevo os importa. Ya os diré en el siguiente párrafo por qué os importa ahora y antes no.
Las personas mayores os interesan mucho ahora, os oigo hasta "llorar" por ellos, porque la población gijonesa ha crecido mucho gracias a esa enorme población de reemplazo, Plan Kalergui, que ha ido creciendo mucho más de lo normal y esperable; eso sí, antes habéis echado a los jóvenes a otros lares, en Europa, América, Vietnam o Singapur, para que se busquen una vida mejor. Se han cerrado empresas, academias, fábricas, minas y altos hornos, todo por el progreso, las placas solares o los aerogeneradores. A la vez nos dejáis sin olivos, naranjos, trigo, cebada, verduras, vacas, ovejas, gallinas, huevos y demás.
Todo por un "Plan Local de Acción de las Personas Mayores 2025-2028 que comenzará a aplicarse este año", claro, justo cuando casi termina la primera parte de esa Agenda, antihumana, de la Agenda 2030. Me temo que la población asturiana no se dejará engañar por una red de... no sé qué calificativo o sustantivo usar, que cada uno que lea esta carta elija el que crea que va mejor.
En Gijón y muchas partes de Asturias hay miles de familias que viven de subsidios de miseria y muchas personas mayores que siempre estuvieron solas, muchos como elección vital, y ¿ustedes pretenden meterles gente desconocida en sus viviendas? No me hagan reír, pónganse a crear trabajo BIEN PAGADO, dejen de elucubrar absurdos como este y lárguense ya, porque su trabajo consiste en empobrecer a una población a la que van ahora a robarle su vida y hasta su dignidad.
Las viviendas se construyen, las viviendas no se roban a nadie, y esa es su jugada maestra, harán el mal, pero como si fuera algo bueno. Desde luego, qué fácilmente se corrompen los seres humanos. Hartos de no hacer nada, solo fantasean qué hacer y qué delito cometer, les recuerdo que el robo no es una ley contra la soledad deseada o no deseada, es algo que va contra la dignidad de un ser humano, tenga los años que tenga.
Europa hace mucho que ha dejado a los ancianos atrás, solo los usan para extorsionarlos, como sería el caso, si les obligan a meter en sus casas a gente que ellos no quieren ni admitir ni albergar ni acoger en sus viviendas.
Déjense de buenas palabras y muevan el "culín", no el de sidra, hagan su trabajo, bajen los impuestos y, si no sirven para hacer lo que toca, lárguense, harán un favor a los gijoneses, a los asturianos en general y al mundo entero. No solo se vive de los bares, los hoteles y el xiringüelu, se vive del trabajo bien hecho, y bien remunerado, de una pensión pagada durante una vida entera de trabajo, porque antes había trabajo, ¿ahora vivimos en Disneylandia o en Las Vegas?
A eso vino Sánchez a Gijón, a crear y pactar con cada ministro de Vivienda europeo ese "Tratado de vivienda", yo estuve allí, creo que era 13 de noviembre en 2023, en la Laboral, y vi cómo salía cada uno de los integrantes de esa reunión, se subían a un coche de la UE, que tenía escrito en una de las puertas UE 2023. Ya estaban ustedes en este juego infame, injusto, terrible y triste para los mayores.
Ya lo están intentando en Inglaterra y de momento no pueden, ya se verá. Si dejamos abandonados a los ancianos, ¿qué no harán con nosotros cuando seamos mayores? ¿Tocará introducirnos en un horno crematorio o lanzarnos vivos en altamar para ser pasto de los peces?
Cuando yo era adolescente, íbamos los sábados a ayudar a las monjas a dar de comer a muchos ancianos en Gijón y a visitarlos en sus casas. No nos pedían nada, solo que volviéramos a verlos el próximo sábado. Se dejaban querer y nos querían mucho. A las personas mayores se las quiere, no se las engaña.
Les dejo con unas palabras de la ínclita "ministra de la nada", la señora Yoli-Bambi, de hace un tiempo: "... Es una economía horizontal, que abraza, es inclusiva, cooperativa, es una economía feminista porque cuida los proyectos, los territorios y las personas. Una economía anclada al territorio...". Sin palabras.
Acabo con unas líneas de un poema de José Saramago, "Poema sobre la vejez", y una canción también, del grupo "First Aid Kit", "My Silver Lining", merece la pena escucharlos.
"¿Qué cuántos años tengo? ¡Qué importa eso!
¡Tengo la edad que quiero y siento!
La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso.
Hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso o lo desconocido...
Pues tengo la experiencia de los años vividos
y la fuerza de la convicción de mis deseos".
Me despido como hago siempre, deseándoles paz y bien, pásenlo bien y pórtense bien. ¡Hala, con Dios!
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo

