A Vicente Copete Laviana, mi segundo padre
He dejado pasar unos días para que todo volviera a la tranquilidad y poder dedicar un adiós a este gran hombre que se llamaba Vicente Copete y que tuve por suerte tener por suegro (mi segundo padre ). Sé que LA NUEVA ESPAÑA ( sección Nalón ), le dedicó algunas crónicas y hoy la familia zaragozana le queremos dedicar la nuestra.
Si una virtud tenía nuestro Tití ( así le llamábamos cariñosamente la familia), era la de ser un hombre que amba a su familia, hijos, nietos, biznietos y a sus amigos, que tenía y muchos. Generoso en extremo con todo el mundo, cultivado, elegante, ávido lector y conversador ameno. Copete hizo de la amistad un culto y se hizo querer allá por donde pasó. Fue uno de los fundadores de la Banda de Música de San Martín del Rey Aurelio y también fundador del Centro Social. Trabajaba sin pedir nada a cambio, procurando pasar desapercibido, porque era un hombre tímido y cabal.
Nos has dejado sin pronunciar queja alguna, como lo habías hecho toda la vida, sin despedirte de tus hijos, nietos y biznietos para que no sufriéramos ni sintiéramos pena por tu despedida. Tití, eras un hombre bueno, educado, callado y afectuoso a carta cabal. Desde estas páginas, que con pasíón siempre leías, queremos recordarte con cariño y esperamos que allá arriba en el cielo, junto a tu querida Aya, vuelvas a vivir una segunda vida llena de amor y cariño, que es lo que te mereces. Un abrazo de todos.
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