Mientras Sánchez crece, Feijóo mengua
La vida no tiene favoritos, aunque los elegidos no estarían de acuerdo. Sánchez, por ejemplo, no estaría de acuerdo.
Nuestro Gobierno actual demoniza, estigmatiza y deshumaniza a quienes cuestionan su narrativa. Los ciudadanos somos "monstruos" porque tenemos una idea equivocada, llegamos a conclusiones diferentes y nos atrevemos a reclamar nuestro derecho a buscar la verdad en otras opciones políticas.
Esto es para los zurdos castración mental, incapacitación, reflexión prescrita, repetición supervisada. Pero, sobre todo, es cualquier cosa ¡menos "democracia"!
A más escándalos del PSOE, más se amontonan las causas judiciales y más aumenta la ventaja electoral del Presidente. El señor Tezanos prepara el camino y, en plena vorágine delictiva, omite el delito y publica un sondeo sobre intención de voto que deja a los populares a 15 puntos del PSOE, "previniendo" al personal sobre una abultada derrota del PP en las próximas elecciones. El recuento lo hace Indra.
Sánchez está a solo dos minutos de decir: "Sí, es todo verdad, ¡qué pasa! Lo de mi mujer, mi hermano, mis secretarios de Organización, mis ministros, la presidenta del Congreso, los sobres, la financiación del partido, los prostíbulos, todo. ¡Y qué, qué pasa!".
Pues nada, no pasaría nada. Incluso subiría en las encuestas para humillar a PP y Vox. Volvemos al derecho de pernada, como en el Medievo. Lo único que entonces "solo" se pagaba el diezmo, ahora ya andamos por el 50% mínimo.
Por un lado están las decenas, centenares de personas que se comerían los mocos si todo esto se cayera. Por otro, están los millones de votantes que, en realidad, no sacan nada, pero compran la mercancía como borregos, porque escuchan o leen constantemente lo que les repiten ilustres como Pablo Iglesias, Patxi López, Óscar López, Yolanda Díaz, Cintora, Intxaurrondo, Broncano, Barceló o Almodóvar como palabra de Dios.
En cuanto a la solución, honestamente, ni idea. Personalmente, creo que esto solo se arregla vía episodio traumático (financiero, bélico o de otra naturaleza que no alcanzo a imaginar, ni quiero) que nos llevara a una catarsis colectiva.
¿Recuerda cuando el Juez Dredd (protagonizado por Sylvester Stallone) dice: «Yo soy la ley»? Ahí está nuestro Pedro.
De todos modos, no deberíamos estar preocupados. Que Feijóo vaya a ganar las próximas elecciones es tan real como que le pusieran una bomba lapa a Sánchez. Así que sí, es falso.
Saludos cordiales.
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