La "Lux" de Rosalía
Tanto si gusta su estilo como si no, es innegable que Rosalía acaba de marcar un tanto contra la era de la inmediatez. No está consagrada como una de las grandes artistas de nuestro tiempo solo por su música, sino por su valentía a ser y estar en el mundo. Crea desde un lugar honesto. No tiene miedo a incomodar al resto.
Mientras otros intentan alcanzar a los algoritmos, ella se detiene. Tras tres años sin sacar música, Rosalía se dio tiempo y espacio para investigar, leer y decidir cuál era el camino a seguir. En este nuevo proyecto, decide dar voz y lugar a mujeres que no lo tuvieron. Santas, escritoras, filósofas. Los temas principales de sus letras son asequibles para todo el público, pero si rebuscas consigues una nueva forma de entender a las que son sus musas, aunque en su tiempo fueran creadoras. Acompañadas de sinfonías y música orquestal crean un conjunto único, que se unen a la estética de la artista para dar vida al concepto.
Julia Martínez (Archivo 909) citaba a Walter Benjamin en uno de sus vídeos. El filósofo nos alertaba: en la era de la reproducción masiva el arte pierde lo que lo hace arte. Su aura. La obra se vuelve un objeto de consumo, de usar y tirar para un público que no se adentra ni se compromete.
Rosalía, en cambio, sí lo hace. No pierde su aura, sino que la cultiva. Crea en consonancia con lo que cree, no a lo que otros quieren de ella. Ella envuelve su aura para regalárnosla con luz, personalidad, vanguardia, e incluso, ternura, a un mundo que parece haberse olvidado su significado.
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