Melchor, Gaspar y...
Hace mucho, mucho tiempo, 2.009 años para ser más exacto, unos magos procedentes de países lejanos llegaban a Bélen para rendir pleitesía al recién nacido Rey de los Judíos. Estos magos o sabios, no creo que fueran reyes, llegaban guiados por una estrella o cometa que les condujo, según la leyenda, hasta el lugar indicado. Al menos, los dos primeros iban impulsados por una fuerza o instinto que les dirigía al lugar. ¿Pero el tercero?
Algunas tradiciones orientales dicen que se encontraba de cacería y cuando pasaron por su territorio Melchor y Gaspar le convencieron para que les acompañara a Israel.
Ahora bien, ¿si estos no hubieran pasado por el territorio del cazador habría cambiado la historia o la tradición? Es muy posible que hubiera continuado la cacería en compañía de su consejero-ministro y las piezas por ellos cazadas no sólo habrían sido cabras hispánicas, ¿algún faisán? o conejos de esos que se suelen sacar precisamente de una chistera.
El caso es que Melchor, Gaspar y... emprendieron viaje y lograron llegar a su meta, que era para lo que estaban destinados, cumpliendo con el contenido que la historia o la tradición les tenía asignado. Si eran magos o sabios hicieron lo debido, porque no eran cazadores y como grandes instruidos prefirieron evitar que les ocurriera lo que pasó al cazador cazado.
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