Por una sanidad pública digna en el Área Suroccidental de Asturias
Los firmantes, facultativos del Hospital Carmen y Severo Ochoa de Cangas del Narcea, ante las informaciones recientemente aparecidas en la prensa referentes a la suspensión de la construcción del nuevo centro de salud de Cangas del Narcea, queremos hacer las siguientes consideraciones:
En primer lugar, manifestar nuestra indignación ante la confirmación por parte de los responsables políticos del rechazo a la construcción del nuevo centro de salud. Afirmar, como se ha dicho, que este equipamiento no es necesario por no existir problemas de espacio ni de accesibilidad para los usuarios, además de negar lo que es evidente y todos sufren a diario, resulta insultante para la población de este área. Queremos recordar que el actual centro de salud está ocupando desde hace 22 años de forma «provisional» por parte del edificio del Hospital y que está produciendo trastornos diarios de funcionamiento, tanto a la atención primaria como a la especializada: consultas abarrotadas en espacios reducidos, consultas externas en medio de plantas de hospitalización, cafetería pública que también es comedor para el personal situada en una planta de hospitalización, situación de laboratorios en lugar inadecuado con problemas de espacio y climatización, consulta de Hematología en 4 metros cuadrados donde se atienden hasta 80 personas en una mañana, Unidad de Reanimación infradimensionada para las necesidades del centro con frecuentes problemas para la cirugía programada, sala de partos separada del bloque quirúrgico, biblioteca de dimensiones ridículas que ya supuso la pérdida de fondos bibliográficos, sala de calderas en la segunda planta del edificio, sala de mortuorios contigua a las cocinas, etcétera. Todo estos trastornos en el trabajo diario se van a perpetuar con esta decisión, con el consiguiente malestar entre los profesionales en un área que ya tiene serios problemas para cubrir sus necesidades de médicos especialistas. Si se quieren fidelizar profesionales de calidad y/o captar a otros nuevos, no podemos pretenderlo aplicando medidas como la que se ha propuesto; existen diferentes formas de cerrar un hospital, y ésta puede ser una de ellas.
Después de años de espera, con continuas promesas y retrasos injustificados por parte de todas las administraciones, y tras la urbanización del solar donde estaría ubicado, consideramos indignante y discriminatoria la actitud de estos políticos que pretenden suprimir «por decreto» una necesidad reconocida y consensuada previamente por todas las fuerzas sociales y políticas.
Nos parece una decisión arbitraria e injusta por parte de quienes se supone sirven a los intereses de la sociedad, negando a los usuarios de este área sanitaria una necesidad urgente de mejora estructural que afecta tanto a la asistencia primaria como a la especializada, primando motivos sectarios y con pretendidos engaños de «tipo técnico» a la opinión pública.
Exigimos a la Dirección-Gerencia del Área Sanitaria Suroccidental y a los representantes políticos, y pedimos a las fuerzas sociales un posicionamiento firme y claro en defensa de las necesidades de la población, dejando de lado intereses partidistas, en aras a garantizar la equidad en la asistencia sanitaria.
Luis Flórez, Rodolfo Abella y Marcos Carreño, en representación de 40 médicos especialistas del Hospital Carmen y Severo Ochoa de Cangas del Narcea.
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