El mercader, el político y el Nazareno
En la emisora de radio Onda Cero se anuncia la procesión del Nazareno, patrocinada dice el anuncio- por una un restaurante local y por el Ayuntamiento. Lo que no sé es si lo patrocinado es la retransmisión, esto es, el medio de comunicación, si la procesión misma. El segundo extremo me parece menos probable, por el carácter de los patrocinadores. Me explico.
Si lo patrocinado fuera el acto religioso, ello significaría que el patrocinador es persona piadosa; si es persona piadosa, en rigor cristiano, no patrocinaría: > (Mt., 6, 2-4).; si fuese el caso de ser la Iglesia la beneficiada, no habría sido patrocinio lo recibido, sino aportación destinada a Caritas Valdesana, sin banda de trompetas en medio de comunicación; luego, el beneficiario es el medio de comunicación y no Caritas.
Algo más. La Iglesia y sus actos religiosos no necesitan de publicidad; nada tiene que vender. Los oficios religiosos no necesitan de la megafonía de los medios de comunicación. Ello es así, porque, tales actos no están concebidos para ser espectáculo de masas, sino para que el creyente tenga la ocasión, cabe la asamblea de hermanos en la fe, de rememorar la pasión, muerte y resurrección de Cristo. Luego, si esto es así, quiere decirse que los patrocinadores buscan la obtención del rédito. ¿Cuál es éste?
Gracia a Dios vivo en el mundo del mercado libre (también los apóstoles del socialismo y sus adeptos). El principio del libre mercado reza así: >. En razón de este principio, es legítimo que el mercader abra las puertas de su comercio a todo aquél que a él quiera acudir, y exponga el producto que considere oportuno. Que determinada mercancía no se ajuste a las exigencias del deber y las normas más elementales del buen gusto, no es objeto de la ley del mercado libre. Otra cuestión es que quienes creemos entendamos, desde la caridad que nos pide nuestro Soberano Moral, que el mercader tenga necesidad de obtener unos ingresos, con los que poder vivir él y los suyos. Mas, en el caso del político, del Sr. Pereiro, alcalde de Valdés, ¿cuál es el rédito esperado?
Aquí, a cualquier mente atenta no le escaparía la manifiesta contradicción. Un miembro de la escala media baja del partido que, con sus leyes y medidas políticas, persigue todo aquello que viene de la Cruz, patrocinando una empresa para dar publicidad al hecho fundamental (pasión, muerte y resurrección de Cristo) y fundador de la Iglesia Cristiana, cuando menos es motivo de sorpresa. Tal vez, para arrojar alguna luz sobre el hecho tan sorprendente, nos debamos auxiliar de la lógica de la contradicción, de Feyerabend, concebida desde una dialéctica lineal (concepción libertaria), concepción antitética a la circular o hegeliano-marxiana que, en cuanto socialista, debe abrazar -se supone- el Sr. Pereiro. Mas lo sorprendente no son las obras del Sr. Pereiro y de su partido; lo sorprendente es que hay católicos que con su voto permiten que el partido del Sr. Pereiro legisle a favor de que una madre pueda negarle a su criatura el derecho a la vida, o la ley que, por definición de términos, es una contradicción, por cuanto que dos hombres o dos mujeres, por mucho que se achuchen, nunca podrán traer al mundo una criatura.
Hay más. A finales de 2009, en Luarca, no en el concejo de Valdes, sino en la villa, había veinticinco familias que tenían que acudir a Caritas. Me consta que el D. Carlos Adaucto (P.P. Luarca) destinó -y destina- a Caritas Valdesana la mitad que a su partido corresponde, en razón de la representación que tiene en el Ayuntamiento. En cambio, estoy convencido que el Sr. Pereiro no ha seguido tal ejemplo. De lo que sí estoy seguro es que en la Casa del Pueblo, así como en las sedes de los sindicatos obreristas no se ofrece, a quienes dicen representar, una taza de sopa caliente, ayuda para pagar el alquiler, luz, tasas municipales, ropa para vestir el parado a sus hijos
Creo en Dios Padre, Soberano Moral; estoy convencido que el régimen de libre mercado, el de las libertades individuales, es el mejor de los mundos posibles; son mis convicciones políticas las que abandera la derecha; así, pues, por estas razones estoy afiliado a Foro Asturias, organización de la que espero sepa respetar los dos órdenes humanos, el religioso y secular.
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