Modales y algún kilómetro de autopista, ¡please!

Será por el olfato atávico que Ángeles García González (AGG) atribuye a los asturianos, pero cuando leo un correo de los lectores en seguida intuyo si viene de un ciudadano de a pie que expresa una opinión o de un caballero de a caballo que imparte doctrina. Ninguna duda de que D.ª Ángeles es una caballera muy bien armada, que monta con mucha seguridad y, desde allá arriba, nos dice a los infanzones lo que nos conviene opinar y lo que tenemos que votar en las elecciones del 22 de mayo (LA NUEVA ESPAÑA, 17.04.11).

–Sin menospreciar los fondos, cada vez adquieren en mí más importancia las formas. Preciosa confidencia suya; pero ojo, que la exquisitez de formas no es sinónimo de una gazmoñería que le impidiera, por ejemplo, denunciar a renglón seguido la mala hostia del nuevo líder surgido en el horizonte de la oposición, el abominable hombre del FAC. Sí la obliga, en cambio, el respeto de las formas a militar en la Santa Hermandad de los/as cofrades de la Barra Trabada. Por eso escribe ella todos aquellos/as o los/as oportunistas, o asturianas/os. Y en esto se pone D.ª Ángeles un tanto pesadina, pues abro al azar una edición bilingüe de la «Ilíada» y lean lo que tendríamos que leer si Homero hubiese sido tan progre como nuestros progres: –A los/as troyanos/as mensajera vino la rápida Iris de pies de viento / y ellos/as junta juntaban ante las puertas de Príamo,/ todos/as en junta común, igual jóvenes/as que viejos/as. Más correcto que bonito, pienso yo (será que estoy chapado a la antigua; será).

Pero vayamos a los fondos (que tampoco hay que despreciarlos). No me perdonaría jamás ser cómplice, por medio del silencio, de unos resultados electorales que podrían ser para Asturias, y consiguientemente para los asturianos, una rémora con arriesgadas consecuencias, escribe García González (o sea, D.ª Ángeles). Qué pasa, en este caso, con las asturianas, ¿tienen un seguro contra los riesgos de la rémora, o no había cogido AGG carrerilla para saltar con la famosa barra?

La rémora, en cambio, viene prolijamente glosada en el escrito de AGG. Es la derecha ultramontana, con sus formas broncas e irreverentes, en gresca continua y mordiendo sin distinguir en el tobillo, en la cadera o en la yugular. Que con tal de crispar, lo mismo le da las chaquetas de Riopedre, los balances de Venturo XXI, los bolsos de la Renedo o la contabilidad de la Roldana, los sobrecostes del Musel o la ampliación de la Laboral (que se le había quedado chica a Tini). O esos 50.000 ovetenses/as, Toreno abajo con 50.000 pancartas y un solo grito en letra redondilla y roja: asesinos/as o viceversa (no, en la viceversa venía la foto de los diputados/as de la izquierda). No era un paso de Semana Santa; era una manifestación contra los bombardeos humanitarios sobre Libia (a los que esta derecha ultramontana se obstina en llamar guerra). Muchas sedes del PSOE están cercadas y los atrapados dentro no logran salir, mientras los pillados fuera no consiguen entrar. Así no hay manera. Si los bestias del FAC llegaran a ganar, lo primero que harían sería sacar las tropas de Afganistán, de Kosovo, del Líbano y de Libia para volver a meterlas en Iraq. Pero los del FAC no pasarán; seguirán las tropas en su sitio y cada mochuelo en su olivo (y aquí paz y allá acción humanitaria manu militari; lo que los fachas llaman guerra).

Desalentador panorama, en todo caso. Una derecha civilizada empezaría por autodisolverse. Eso en cuanto al fondo; que en cuanto a las formas, pediría el voto útil para la izquierda plural (como hace con escaso entusiasmo y ejemplar comedimiento nuestra ÁGG). Menos mal que Asturias, según dice, es una región plural, moderna, competitiva y progresista y el candidato Javier Fernández, un hombre tranquilo y culto, sincero y pudoroso que encarna la esencia más pura del socialismo democrático, valga la redundancia (coletilla que omite AGG por considerarla superflua). Esta Asturias la debe de tener D.ª Ángeles a muy buen recaudo, en una vitrina en casa, o retozando en el jardín de su parcela. Pena que no la saque a pasear de vez en cuando y avise cuándo para que podamos verla; pues tiene que ser cosa de ver la Asturias esa, cuando la que vemos a diario más de cuatro (sin ser malos en el fondo) es una región deprimida, de prejubilados en masa y masivo paro juvenil, asistida por dinero tonto a espuertas (una especie de Cuba o Nicaragua si no fuera por otras zonas de la sufrida España, donde hay empresas que funcionan y pagan impuestos para financiar el parche de lo de aquí).

-Espero de corazón que una amplia mayoría de asturianas/os demos la bienvenida a quien nos ofrece esa noble y nueva versión de la poco prestigiada pero esperanzadora política. Ángeles o la bondad al alcance de la mano. Asturias, paraíso político natural, con Adán Fernández de candidato y Eva García de cronista. Angelical. Ángeles García no tendrá nada que perdonarse, pues tendríamos que ser tontos o malos para no apuntarnos a este socialismo de las más puras esencias. A este socialismo chic, casi CH. Lo de AGG es análisis; la propaganda es otra cosa.