Parres, la Bella Durmiente
España se acostó monárquica y se levantó republicana; es un tópico para resumir las consecuencias de las elecciones municipales de abril del 31. Cuando Alfonso XIII conoció los primeros resultados, entendió que muchos españoles estaban de la corona hasta la coronilla. Así que dejó la corona sobre la mesa y ordenó que le prepararan las maletas. Y eso fue lo último que aquel rey mandó en España.
El vuelco electoral de las últimas municipales fue mucho más rotundo que aquel del 31. El 21 de mayo España se acostó socialista hasta el cogote y el 22, de cada urna alzó el vuelo una incontenible bandada de gaviotas. Y aquí se acaban las analogías, pues Zapatero no es Alfonso XIII. ZP es un abogado de León que exhibe su recibo de alquiler de la Moncloa hasta marzo 2012. No es cuestión de perder unas mensualidades anticipando su entrada en la historia. Así que no quiere oír hablar de maletas y se hace el tonto cuando los barones del partido se las ponen en la mano.
Como no hay regla sin excepción, la excepción electoral la pone Parres (Arriondas) que, una de dos, o en vez de despertar entró en coma político, o los parragueses son tan listos que, cuando los demás van, ellos ya vuelven. El caso es que Parres se había acostado el 21 con un socialismo en precario y trasnochó hasta el 23, con un PSOE en delirio que no se acababa de creer la mayoría absoluta. Y no era para menos, pues la victoria era insólita por inmerecida; los socialistas con IU acababan de dilapidar una legislatura en tonterías y en disparates. Abro el diccionario: Dilapidar, malgastar los bienes propios, o los que uno tiene a su cargo. La Corporación de Parres malgastó los bienes a su cargo en estudios de arquitectos y en asesorías externas, buscándole las vueltas a la ley. Ese fue el mayor disparate.
Soy uno de los seiscientos parragueses que estamos esperando que la Corporación conteste a las alegaciones contra un PGOU del que nunca más se supo. Había acordado el Pleno cursar consulta externa para saber si tenían obligación de contestar. Pero hombres y mujeres, ¡con lo barato que sale ser bien educados! Se contesta a los saludos, se contesta a las llamadas que uno encuentra en el contestador o en el correo electrónico. Qué es, ¿que si saludas a un concejal en la escalera, tiene que consultar con su abogado para decidir si te contesta? Trabajo me cuesta creer en una democracia que se dice progresista y no sabe siquiera ser educada.
La gran incógnita son los circuitos mentales por los que el voto socialista transitó a las urnas. ¿No afecta al electorado parragués los cierres y despidos en cadena en la industria local del mueble y en la construcción, la juventud en paro y al pairo? ¿Les parecen pocos los cinco millones de españoles sin trabajo? ¿No va con ellos la Operación Marea, que no ha hecho más que empezar y que parece confirmar el dicho de que los asturianos somos los andaluces del norte? ¿Sería al miedo a la derecha que nos va a quitar las pensiones, lo bailado, lo por bailar y hasta las ganas de comer? ¿O lo que dejan caer las peores lenguas, eso de que el Excelentísimo Ayuntamiento es una excelente agencia de colocación? ¿Será que aplauden BILDU y la rendición a ETA? ¿O a caso Arriondas es Andorra y no va con ella lo de España?
-La gente normal del PSOE lo que quiere es que Zapatero y sus viudas se vayan a sus casas, escribe Joaquín Leguina, barón del PSOE y no un facha, que se sepa. A ver si los socialistas parragueses van a ser paranormales y les gustaría casarse con las viudas de ZP. Bromas aparte, insólito por inmerecido y a contra corriente, el triunfo del PSOE en Parres no es menos rotundo. Hay que felicitarlos y desearles que gestionen la victoria con modestia y eficacia por el bien de todos los parragueses. En política como en deporte es tan importante saber ganar como saber perder. De momento, a mí me han regalado un bolígrafo (menos da una piedra). ¿Será para que escriba? Pues es lo que estoy haciendo. Gracias.
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