La Nueva España » Cartas de los lectores » Un suceso ocurrido hace 48 años

Un suceso ocurrido hace 48 años

1 de Abril del 2009 - Nicanor Rozada (La Paré)

Cuando transcurría el año 1960 y el invierno se presentaba con todo rigor, descargó sobre los concejos de Asturias una fuerte nevada y en particular en los altos pueblos del concejo tevergano, por estas fechas yo me encontraba prestando mis servicios como encargado general de la empresa Bienvenida II, situado en el duro y difícil pueto de Ventana, el medio que utilizábamos para trasladar a los trabajadores a su punto de trabajo era un autobús, que salía del pueblo de San Martín de Teverga, que subía recogiendo a los trabajadores en sus respectivas paradas, como eran los pueblos de Riello, San Salvador, Fresnedo y Páramo, entre estos dos últimos pueblos debido a las altas montañas que se alzan sobre la carretera y el río que desciende desde al vega de Socellares, se desprenden fuertes arrastres de nieve, conocido por los lugareños como "trabes" o "adenes" (aludes) que desde tiempos va arrastrando a su paso todo cuanto se interpone en su camino, llegando a centrar sobre la carretera hasta seis, ocho o diez metros de altura de nieve. El día 21 de diciembre de este año 2008, me trasladé desde Oviedo hacer esta ruta, que tantos recuerdos y afectos encierran para mí, ya que a lo largo de treinta y cuatro años me correspondió la responsabilidad de abrir dicho puerto, que comunica con las babias leonesas, debido a la fuerte actividad minera que es estaba desarrollando a lo largo de todas estas décadas del 50 hasta el 90, pero en esta fecha de 1960 una gran tragedia está a punto de ocurrir, la empresa Bienvenida II, a lo largo de varias décadas se tuvo que ocupar, para desarrollar su actividad minera de mantener abierta la carretera desde San Martín de Teverga hasta el Puerto de Ventana, cuando llegaba el invierno había que movilizar una brigada de trabajadores que podía oscilar entre los cincuenta y cien hombres, en este invierno de 1960, estábamos dando paso al primero de "los adenes", conocido como "el de covarrubia", tendría unos diez metros de altura y en este punto tenía centrado a un grupo de diez hombres, de los más probados, debido a la altura que tenía "el adene", los trabajadores decidieron entrar en visera en la expala, para evitar parte del trabajo, facilitando de esta forma mejor el movimiento de la nieva, cuando ya habíamos tocado el firme de la carretera, la gran visera que quedaba sobre nosotros, se corta y se cae sobre nosotros, allí habían quedado sepultados cinco trabajadores, que debido a la fuerte actividad del grupo logramos rescatarlos a todos ellos con vida, cuando logramos recuperar al último trabajador, José González, del pueblo de San Salvador, tuvimos que utilizar todos nuestros esfuerzos para recuperar su aliento, más tarde algunos de llos fueron hospitalizados, sin que a ninguno de ellos les quedara secuelas para el futuro.

A consecuencia de este accidente, donde cinco trabajadores estuvieron a punto de perder su vida, ello me llevó a movilizar todos cuantos medios tenía a mi alcance para evitar estos accidentes en futuros inviernos, movilicé a Obras Públicas, a través de su representante oficial para toda esta zona, como era Julio, facultativo de Villanueva de Proaza, me prometió que en los próximos presupuestos saldría una partida para evitar en el futuro posibles tragedias humanas. Esto pensaba yo, junto al "adene", este domingo pasado, día 21 de diciembre 2008, cuarenta y ocho años después estaba recordando aquella tragedia y todo continúa igual.

Señores autoridades de Tráfico, señores de nuestra autonomía asturiana, ustedes tienen la misión de velar por nuestras vidas, a todos vosotros me dirijo para hacerles saber que son muchos los accidentes que cada año están sucediendo como consecuencia de la nieve, a vosotros os corresponde el poner coto a estos puntos negros que tanto acechan en nuestras carreteras y con un bajo coste se pueden evitar grandes tragedias, sería triste pensar que esto pudiera ocurrir en un día cualquiera donde una familia más pudiera ser destruida por el abandono inconcebible de nuestros autoriades, el remedio, si esto sucediera, ya llegaría muy tarde, el evitarlo está a vuestro alcance.

Cartas

Número de cartas: 45901

Número de cartas en Septiembre: 5

Tribunas

Número de tribunas: 2079

Número de tribunas en Septiembre: 1

Condiciones
Enviar carta por internet

Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.

» Formulario de envío.

Enviar carta por correo convencional

Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:

Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo
Buscador