Sebastián, el cobrador del frac
El recibo de la luz ha vuelto a subir en contra de las promesas ofrecidas en su día por el ministro Miguel Sebastián.
El mes de julio ha irrumpido con nuevas subidas de precios, entre ellas la de la energía eléctrica, que agravarán un poco más la estrechez económica de las familias, muy golpeadas por la crisis. Asimismo, y en contra de lo que había manifestado recientemente el ministro de Industria, quien anunció la congelación de los precios, la tarifa de este mes de julio, un alza del 1,5 por ciento, lo que viene a sumarse a la brutal subida del 9,8 por ciento en enero. Es evidente que estas alzas de la energía están vinculadas a las subidas de ciertas materias primas, como el petróleo. Sin embargo, la falta de explicaciones y las contradicciones y renuncios de los responsables políticos incrementan el malestar de un cuerpo social en el que, según la EPA publicada en abril, hay nada menos que 1.386.000 familias con todos sus miembros en paro. No es extraño pues que, a pesar de la atonía del consumo, el ahorro de las familias se haya desplomado.
Ya sabemos que éste es un Gobierno de pocas luces, con la inteligencia en penumbra. Y que el ministro Miguel Sebastián, el de las bombillas, parece estar también asociado a la oscuridad. Este Ministro en declaraciones a la prensa, el 6 de junio pasado, se había mostrado claro y rotundo cuando dijo: «No va a haber más subidas de la luz durante el 2011, por el esfuerzo muy importante exigido en enero a los ciudadanos». En su boca el Ejecutivo se comprometía a no volver a tocar la factura de la luz este año.
Las compañías eléctricas que operan en España son unas privilegiadas, pues con la que está cayendo, han seguido ganando en estos seis meses de 2011 muchos millones de euros. No vale la excusa de que les sale muy caro generar la energía. Nunca se pondrán en números rojos, sino más bien los que como clientes estemos con frecuencia en números infrarrojos.
Este último incremento que una mayoría de españoles ya estamos asumiendo desde el día uno en la factura de la luz, sigue siendo consecuencia inexcusable de no haber abordado en su momento una reforma integral del sector eléctrico que realmente impulsase su liberalización.
En el año 2004, el déficit de tarifa de las eléctricas era de 1.500 millones, pero al no haber abordado con decisión ese problema cuando aún era manejable, la cifra se ha disparado y una vez más somos los ciudadanos los que terminamos pagando, y precisamente en el peor momento, la ineficacia del Gobierno.
Hasta aquellos que nunca fueron a la escuela son capaces de comprender que, si suben la luz y el gasto otra vez, y, por el contrario siguen congeladas las pensiones, la posibilidad de ahorro de los jubilados es imposible.
Mucho nos tememos, Ministro, que durante bastante tiempo continuará habiendo poderosas razones para seguir estando muy indignados. Las economías domésticas ya no pueden con más subidas. Y por otra parte, tampoco es el momento de dejar al contribuyente a oscuras.
Don Miguel, puede usted creerme, nos sobra mucho mes ante tanto gasto extra.
Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en el formulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital.
Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección:
Calvo Sotelo, 7, 33007 Oviedo