Mensaje desde el planeta Mieres, galaxia Asturias
Estimados extraterrestres: Me habéis preguntado por nuestra forma de gobierno y yo amablemente os contesto, tenemos un sistema llamado nacionalpartidismo, cuya base son organizaciones de descomunal tamaño, que alternativamente se reparten el poder, aquí en las Españas, tenemos dos grandes mastodontes y después en función de peculiaridades y de cuotas de poder territoriales, otros mas pequeños circunscritos a ese ámbito, pero con gran poder decisorio en sus zonas de influencia, en total, rara vez pasan de 6 o 7 organizaciones. En cuanto a los líderes de dichos partidos, se eligen por arcanos indescifrables, no aptos para la comprensión de los simples mortales, ora el legendario cuaderno azul, cual Zohar o Libro del Esplendor, o bien el dedazo del líder movido por incompresibles resortes internos, eligen a esos líderes, que realmente no tienen capacidad decisoria, más bien actúan como sumos sacerdotes de su culto, presidiendo y organizando sus ritos y asambleas. ¿Que quién decide? Es difícil de explicar, pero cuando hay tanto en juego las cosas no se dejan al azar y los poderes fácticos son intuibles para el nativo, así que para el foráneo es poco menos que misión imposible, y ya no hablemos de Bilderbergs y Echelon.
Como veis, el sistema roza la perfección para los intereses de esas organizaciones, pero ya sabéis que ni siquiera en Andrómeda existe la perfección, así que aquí no iba a ser menos y el sistema tiene sus puntos flacos, el principal son los mal llamados votantes, los cuales no son más que unos andrajosos y pedigüeños, que tienen entre otras ridículas pretensiones alterar los designios de los partidos, votando libremente, pretensión muy fácil de burlar mediante el sistema denominado listas cerradas, es decir, o Pepe o Manolo, y de ahí no se puede salir so pena de que tu voto sea considerado nulo, de hecho hay candidatos que se presentan elección tras elección perdiendo una y otra vez, pero ese es su cometido y su recompensa en la oposición también tiene sus encantos. Así que el votante está más que controlado, aunque de vez en cuando estos inician una revolución o movimiento que se suele aplacar, o bien dando un puestín a los cabecillas de esta, y, si no lo aceptan, se hace un salvadorallende, recientemente un grupúsculo de autodenominados indignados decidieron salir a la calle a reclamar lo que a su juicio era una injusticia, pero el poder no descansa y rápidamente infiltró entre ellos al grupo que antes se denominaba vagos y maleantes y ahora perroflautas, en un claro intento de desacreditar a tan peligroso movimiento, y, voilà, objetivo conseguido, recientemente observé en la principal plaza de Vetusta a un grupo de ellos, hacían corro y en el centro, entre los humos sospechosamente densos del tabaco, atento al ademán, ejerciendo el liderazgo, se hallaba lo que mi querido güelu llamaría un perrín pintu, también el poder usa otros mecanismos sociales que hagan más inofensivas a las masas, por ejemplo, con los niños, nada de jugar a azurriágamela o al esconderelite; no, no, no que esos juegos pueden tonificar los músculos, fomentar el espíritu de equipo y la guerra de guerrillas, así que pensaron enganchemos a los niños a las consolas, eso les hará dóciles y excelentes operarios en un futuro delante de sus PC; los resultados están a la vista: en el 34 los indignados dinamitaron cuarteles de la Guardia Civil, iglesias y hasta la catedral; en los 60 arrojaban adoquines y hacían huelgonas... Ahora los indignados agreden de puro aburrimiento a los sufridos oyentes en asambleas de días para decidir el color del papel higiénico del campamento. Vamos, que se ve cómo la belicosidad y compromiso del pueblo llano van claramente in minuendo.
En fin, amigos extraterrestres, quiero pensar que sois amigos y no hacerle caso al agorero de Hawking, en otra entrega os hablaré sobre sindicaleros, la no división de poderes, cargos de confianza y militantes; os prometo que no tiene desperdicio. Saludos desde el planeta Mieres, galaxia Asturias.
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