Despedidas, adioses definitivos
Recordatorio de recordatorios de recordatorios. No hay nada mejor en la vida que dejar memoria de vuestros hechos con los que deseáis que os recuerden.
Jenofonte
Siempre andamos diciéndole adiós a lo que queremos. Sí, siempre siempre estamos diciéndonos adiós. «La Tacita» (hace algunos meses) escribió un cafelito titulado sencillamente «Adioses». Dentro de la grandísima emoción que trataba de disimular el presidente actual del Gobierno español cuando anunció personalmente su renuncia a las elecciones generales tragándose las lágrimas ante un posible tercer mandato al cual renunciaba. Ese adiós representó para él un adiós especialísimo. Segurísimo que sí. Ayer por la mañana el señor Rodríguez Zapatero determinó la fecha inamovible de su propia despedida.
Amables lectores (18.53 horas de ayer, viernes, cuando este escribidor os dice, amables lectores, adiós por unos días).
Despedida y cierre. ¡Ay, a veces, bueno, siempre siempre siempre, cuánto duelen los adioses...!
Érase una vez.
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